Billar
Mayte Ropero, una española entre las estrellas del billar: "En América y China nos piden autógrafos por la calle"
Varias veces campeona de España, la mallorquina fue quinta en el Mundial por equipos mixtos celebrado en Puerto Rico y por fin puede vivir de su pasión.
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Mayte Ropero sigue rompiendo moldes en el mundo del billar. A sus 33 años ha sido varias veces campeona de España y el pasado noviembre disfrutó de una experiencia inolvidable en Puerto Rico, logrando el quinto puesto en el Campeonato del Mundo por equipos mixtos junto a Fran Sánchez y David Alcaide. "Fran y David son de los mejores jugadores del mundo y tenemos muy buen feeling. Quedamos quintos entre los 16 países participantes, así que nos fue muy bien", celebra la mallorquina, afincada desde hace más de una década en Santiago de Compostela.
La ganadora más joven de un campeonato nacional
La afición de Mayte por el deporte del taco y el tapete le viene desde niña. "Mi padre y mi hermano jugaban a bola 8 y como buena hermana pequeña también quise probar", recuerda sobre sus inicios. La mejoría fue fulgurante y con solo 14 años se convirtió en la ganadora más joven de un campeonato de España absoluto femenino, récord que todavía ostenta. Actualmente es la mejor española del ranking internacional, en el puesto 22º, y por fin puede vivir de la que siempre ha sido su pasión.
"La situación en el billar ha mejorado en los últimos años"
"Sigue siendo muy difícil vivir del billar a nivel profesional, pero la situación ha mejorado en los últimos tiempos", reconoce Mayte, que cada año viaja a competir internacionalmente sobre todo por Europa y Estados Unidos. Para los campeones en la gran cita de Puerto Rico había un premio de 120.000 dólares, mientras que ella y sus compañeros se embolsaron unos 12.000 por la quinta plaza.
A lo largo de sus viajes por el mundo, Mayte ha descubierto una fama inesperada. "Me sorprende muchísimo que en América o en China la gente te conoce, te para por la calle y te pide autógrafos. Esto en España si no juegas al fútbol es impensable", lamenta acerca del prestigio del billar en otros países. "Aquí antes era considerado un juego de bar al que jugabas mientras tomabas unas copas, y ahora lo sigue siendo un poco", explica sobre unos prejuicios, por fortuna, cada vez más superados en nuestro país.
A Galicia por amor
Mayte cambió su Mallorca natal por Santiago de Compostela en 2012. "Me vine a Galicia por amor y aquí sigo, muy feliz", apunta sonriente junto a su pareja, Cova, a quien conoció en un torneo. Juntas emprendieron varios negocios, primero un local de hostelería y más tarde una tienda, hasta que en 2020, tras la llegada de su hija, Mayte empezó a tomarse el billar "más en serio". Ahora cuenta con "un entrenador y una psicóloga" que le ayudan a mejorar la técnica y a lidiar con la presión. "He notado una evolución muy clara gracias a eso", enfatiza.
Implicada en la difusión de este deporte, Mayte es socia -y orgullosa deportista estrella- del Club de Billar Adai, cuyas instalaciones visita siempre que puede para brindar algún consejo a los más jóvenes. Se trata de un caso atípico, pues en esta pequeña aldea de O Corgo (Lugo), de apenas 70 habitantes, hay más jugadores federados que vecinos. El 6 y 7 de abril acogerán con ilusión la cuarta Copa de España femenina.
Con vistas al futuro, Mayte reconoce que "sería genial" poder disputar los Juegos Olímpicos de 2028, a expensas de que el COI decida incluir el billar en la cita de Los Ángeles. "Se está moviendo bien el tema, yo confío, pero no nos dicen nada, está muy en secreto", desliza esperanzada.
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