La mejora en la que trabaja Aston Martin de cara al GP de Australia

Tras una semana de parón, la Fórmula 1 regresa este fin de semana con el GP de Australia, tercera carrera del Mundial de F1 2023. El trazado de Albert Park, uno de los más icónicos de este deporte, espera a los pilotos del 'Gran Circo'. Por delante 58 vueltas a los 5,3 kilómetros, divididos en 14 curvas (6 a izquierdas y 8 a derechas).

Aston Martin y Fernando Alonso se presentan en el GP de Australia tras un espectacular inicio de Mundial, donde el asturiano ha sumado dos terceros puestos que les sitúan con 30 puntos, a la estela de Pérez (43 puntos) y Verstappen (44 puntos). El AMR23 se ha mostrado como un monoplaza muy competitivo los domingos, pero una de sus carencias se suele ver los sábados, en las clasificaciones. Y es que a una vuelta el rendimiento del Aston Martin disminuye y la razón está localizada: es el peor equipo en relación al DRS. Los datos demuestran que el monoplaza de Fernando Alonso y Lances Stroll es el peor de la parrilla cuando se activa al artefacto para adelantar.

Según los datos recogidos por F1 Data Analysis, el DRS del AMR23 es el peor de los diez equipos del Mundial de F1. Esto se traduce en una menor velocidad punta en las rectas, lo que supone un problema para Alonso y Stroll y una desventaja respecto al resto de monoplazas. El Aston Martin es la escudería con menos reducción de drag de la parrilla (20,7%), muy lejos de Red Bull y Haas, los mejores monoplazas en este aspecto con un 31,5%.

Los datos evidencian que el AMR23 tiene margen de mejora en este sentido y es que las otras nueve escuderías están por delante de los de Silverstone: Williams (30,4%), Ferrari (28,3%), Alpine (28,0%), McLaren (27,9%), Alfa Romeo (27,7%), Mercedes (23,8%) y Alpha Tauri (21,5%).

Estos fríos porcentajes se traducen en un déficit de unos 10 km/h en las rectas, cuando se puede activar el DRS, una diferencia que ya están tratando de reducir en Silverstone.

Una prueba de lo que supone para Fernando Alonso estos problemas con el DRS se pudo ver en el trazado de Jeddah, donde Checo Pérez pasó al asturiano sin problemas en plena recta, mientras que el piloto de Aston Martin no tenía velocidad punta para adelantar al RB19 en el GP de Arabia Suadí. En la escudería inglesa son conscientes de que es clave solventar estos problemas para dar otro salto en rendimiento. ¿Lo lograrán en el GP de Australia?

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