Fitness

Planet Fitness aterriza en Madrid con la temida "alarma de flipados"

Esta cadena de gimnasios cuentan con una serie de normas únicas, desde la prohibición de camisetas de tirantes hasta una alarma que penaliza los excesos en el entrenamiento.

La franquicia de gimnasios Planet Fitness ha llegado a Madrid con su propuesta de ofrecer un ambiente diferente, libre de intimidación, con un modelo que se basa en la accesibilidad y la inclusión. Un gimnasio abierto para toda el mundo, especialmente dedicado para aquellas personas que es la primera vez que se animan a ir a hacer deporte. Una práctica que libera de prejuicios y da libertad al público, algo que llama la atención de muchos.

"Planet Fitness surge con la idea de ofrecer una zona libre de críticas a todas esas personas que alguna vez se han sentido intimidadas en el día a día de un gimnasio" confiesa César Martínez, manager de Planet Fitness Delicias, que tienen claro cuál es el objetivo de este gimnasio en Madrid.

Uno de sus aspectos más llamativos de estos gimnasios es el código de vestimenta. Las camisetas de tirantas, las sandalias o los tejanos está completamente prohibidos tanto para hombres como para mujeres. También cuentan con la controvertida "alarma de flipados" que emite un fuerte sonido y una luz azul cuando alguien deja caer las pesas al suelo o gruñe o grita mientras entrena. Este sistema ha sido objeto de críticas en Estados Unidos, donde algunos lo consideran una medida exagerada. Si incumple alguno de los motivos para que la alarma suene, primero hay un aviso del monitor de sala y si esto se repite ahí sí que se activa la alarma.

Sin embargo los usuarios del gimnasio están encantados con estas medidas, Álex Velasco, primer usuario del gimnasio, asegura que "lo que se intenta evitar es el tiro de mancuernas al suelo, los gritos desmedidos que no vienen a cuento, el estar con un móvil en una máquina media hora".

Lo que buscan con estas medidas es la normalidad y la liberación de prejuicios. "Nadie se fija en nadie y la gente te ayuda bastante" comenta Teresa Ferreira, usuaria del gimnasio. Un ambiente idóneo para realizar deporte y que ayuda a que muchos se animen por primera vez sin tener en cuenta la edad para comenzar a ir al gimnasio. Como el caso de Manoli Olmedo, usuaria de Planet Fitness: "Yo decía que era muy mayor para ir al gimnasio, vine aquí y me encontré tan bien que ya vengo todos los días".

La expansión de Planet Fitness en España sigue adelante, y su desembarco en Madrid es una prueba de fuego para su modelo de negocio. La capital madrileña, con su cultura de gimnasios, pondrá a prueba si estas normas, diseñadas para evitar la intimidación, logran conquistar a los madrileños o si, por el contrario, generan rechazo entre los aficionados al fitness más tradicionales. De momento, según cuentan sus usuarios parece que están teniendo éxito.