Pontevedra se convierte en el epicentro del triatlón al acoger la final de las Series Mundiales

Sesenta y tres países ondearon sus banderas esta noche en Pontevedra. Lo hicieron en el desfile desde A Ferrería hasta la Plaza de España con el que arrancó la ceremonia de inauguración de la final de las Series Mundiales de triatlón, "el evento deportivo más grande de la historia de la ciudad", en palabras de su alcalde, Miguel Anxo Fernández Flores.

E igual de grande ha sido su acto inaugural. Un acto que incluyó acrobacias y vestuarios, de la mano de la empresa pontevedresa Pablo Méndez Performances, que llamaron la atención del público y los deportistas.

"El evento deportivo más grande de la historia de la ciudad"

Entre los discursos posteriores, destacaron las palabras del presidente de la Federación Española de triatlón, José Hidalgo, que, primero en inglés y después en español, destacó que esta es la primera vez que España organiza la Gran Final de las Series Mundiales, un evento para el que aseguró no había mejor opción que "Pontevedra, una ciudad diseñada para la gente, la movilidad sostenible y que lleva muchos años apostando por la celebración de campeonatos europeos y mundiales".

El presidente de la Diputación de Pontevedra, Luis López, y el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, también reflejaron, en sus discursos, el orgullo de que Pontevedra sea la capital mundial del triatlón estos días. Casi 2600 atletas participarán en estas pruebas, que se desarrollarán este fin de semana en la capital del Lérez.

Hubo también, en el acto de inauguración, numerosas menciones especiales. Desde el Camino de Santiago, seña de identidad de Galicia, hasta Javier Gómez Noya. El nombre del cinco veces campeón del mundo fue el más repetido de la jornada. Aunque también estuvieron presentes los de Susana Rodríguez, Iván Raña, Pablo Dapena, Saleta Castro y Antonio Serrat, con los que queda demostrada la gran presencia gallega en esta disciplina deportiva.

La nota emotiva del acto llegó con los juramentos de oficiales, entrenadores y triatletas. En parejas, en inglés, español y uno en gallego, juraron respetar y cumplir las normas, llevar a cabo una competición limpia y cumplir los deberes del deporte.

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