El partido no comenzó bien para Roberto Bautista ya que cedió su primer turno de saque y el serbio se puso 3-0 nada más empezar la semifinal de Wimbledon 2019. Djokovic ya tenía la primer manga en el bolsillo y podía parecer que el partido iba a ser coser y cantar para Novak. Sin embargo, Bautista reaccionó en el segundo set y consiguió romper el servicio de Djokovic con bastante facilidad. Durante el resto del set Bautista mantuvo con firmeza y seguridad su saque e incluso tuvo dos bolas de break para aumentar la ventaja con el serbio.
El partido se decidió por meros detalles. La tercera manga se volvió a resolver por una rotura de servicio de Djokovic en el sexto juego del partido. Bautista reaccionó en el siguiente y tuvo dos bolas de break para igualar el partido pero el número 1 tiró de su saque y consiguió remontar y confirmar su servicio.
El partido fue duro y tuvo intercambios muy largos que hicieron mella en los jugadores, especialmente en Bautista que hubo momentos en los que se le notó muy cansado, Aún así el español consiguió sacar de quicio varias veces a Djokovic, consiguiendo incluso que el serbio se encarase con el público y se desesperara en algunos puntos.
En el cuarto set Djokovic puso la quinta marcha y consiguió romper el servicio de Bautista en el segundo turno de saque. El partido ya estaba muy cuesta arriba para Roberto y se notó en los dos siguientes juegos, no consiguió hacerle ni un punto en el servicio de Novak y volvió a perder su saque. El serbio ya acariciaba otra final de Wimbledon y solo tenía que esperar a que pasara el tiempo.
Roberto cayó de pie y dejándolo todo en la pista provocando que Djokovic tuviera que tener hasta cinco bolas de partido. El serbio se mete en la final de Wimbledon y esperará al ganador del encuentro entre Nadal y Federer. Bautista se despide del mejor Grand Slam de su vida por todo lo alto, cayendo en la pista central, contra el número 1 del mundo y plantando cara hasta el final.