Valentí Sanjuan, en un momento dado de su vida, se vio abocado al abismo cuando perdió a su madre y se quedó sin novia ni trabajo, cogiendo una cantidad excesiva de kilos. Fue entonces cuando el deporte y una serie de retos que se autoimpuso le cambiaron la vida.
"Soy un exgordo que se levantó del sofá", así define Sanjuan su radical cambio. El motor de su vida pasó a ser el deporte, su propia terapia: "No era motivación, era necesidad".
"Solo me calmaba ponerme las zapatillas y salir a correr", confesó Valentí, que según fue viéndose mejor frente al espejo asumió mayores retos: realizar varios Ultraman, la Titan Desert o volar en parapente son solo algunas de las promesas que ya se ha cumplido así mismo.
"Has cambiado el sillón por el sillín", asegura que le dijeron sus amigos cuando comenzaron a ver el giro radical que había dado. Valentí aconseja así a los que atraviesen una situación similar: "Si estás muy gordo igual lo mejor no es empezar corriendo, sino pedaleando un poco".