Entre el pasaje se encuentran 30 menores, diez mujeres embarazadas y varias personas ancianas, además muchos de ellos no tienen dinero para poder pagarse una habitación en un hotel. A lo largo de la noche hubo una situación de tensión cuando la Oficina de ventas de Spanair situada en la terminal de salidas cerró la persiana de la oficina. Muchos de los pasajeros allí concentrados intentaron evitar el cierre por la fuerza, por lo que la policía tuvo que intervenir. Además las dos empleadas de Spanair tuvieron que salir del aeropuerto escoltadas por agentes de la Policía Nacional. Fueron momentos de tensión que se saldaron con algún que otro empujón.
Las dos trabajadores de Spanair han asegurado que la aerolínea no les había comunicado ningún protocolo de actuación, por lo que a las diez y media de la noche desconocían qué hacer con los 250 pasajeros que esperaban frente a sus instalaciones.
"Los pasajeros trataron de evitar el cierre por la fuerza y la policía tuvo que intervenir"
Tras cerrar la persiana de la oficina y acompañar a las trabajadoras de Spanair hasta la calle, los agentes policiales se han quedado en el Aeropuerto para impedir que se produjeran incidentes.
Posteriormente, cerca de las once de la noche, una de las empleadas de Spanair colocó en la puerta de la oficina el comunicado oficial de la compañía en el que se informa de los derechos de los pasajeros, entre los que se encuentran la devolución del billete y la posibilidad de viajar a una tarifa económica con Vueling, Air Europa e Iberia, que en el caso de los vuelos internacionales asciende a 100 euros.
La suspensión de este vuelo también supone la anulación del vuelo de vuelta de Nador a Palma previsto a la una de la madrugada. Los pasajeros, molestos con la medida de la aerolínea, han remarcado que ellos lo que quieren es viajar a Nador sin tener que pagar un euro de más, teniendo en cuenta, según han insistido, en que muchos de ellos "sólo les queda en la cartera diez o veinte euros".