El Banco Central Europeo mantiene los tipos de interés en la zona del euro en el mínimo histórico, el 0,25%. Se habían creado expectativas sobre una posible nueva rebaja de tipos, pero finalmente Mario Draghi ha preferido esperar y no anuncia ninguna otra medida encaminada a controlar la inflación.
Así, pese a la caída de la inflación, la mayor parte de los expertos preveía que el BCE no iba a actuar este mes. Y es que la inflación interanual en la zona del euro bajó exactamente una décima en enero, hasta el 0,7 % frente al mes anterior, según el cálculo preliminar de Eurostat, la oficina estadística de la UE.
La tasa de inflación se aleja mucho del objetivo del BCE, que es mantenerla cercana al 2 %, pero siempre por debajo de esta cifra, para lograr la estabilidad de precios.
Por otra parte, el propio Mario Draghi ya dijo a comienzos de enero que la entidad monetaria actuaría en caso de que empeorasen las expectativas para la inflación.