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ABOGA POR UNA MAYOR AUTORIDAD SUPERVISORA

El Banco de España apuesta por una supervisión 'in situ' en las entidades relevantes

Las novedades que se proponen en el informe del Banco de España pasan por tener 'in situ', en las entidades más importantes figuras supervisoras que una vez finalizada su función entregarán a la entidad un resumen de las situaciones que precisan corrección o de las que ya han sido modificadas.

La Comisión Interna del Banco de España plantea, entre otras, propuestas de mejora en áreas como el establecimiento de un marco estandarizado para la adopción de medidas supervisoras en función del perfil de riesgo de las entidades de crédito, el seguimiento continuado 'in situ' en entidades relevantes o la formalización de las actuaciones supervisoras. Estas mejoras se desprenden del informe elaborado por la Asociación de Inspectores de Entidades de Crédito del Banco de España,

Respecto a este último aspecto, el informe propone, entre otras cosas, fortalecer el procedimiento de planificación de las actuaciones inspectoras, así como el procedimiento de seguimiento del cumplimiento de los escritos de requerimientos y observaciones.

Asimismo, recomienda que, una vez finalizada la actuación supervisora 'in situ', el equipo inspector entregue a la entidad inspeccionada un documento resumen de las situaciones observadas que requieran corrección o hayan sido corregidas durante la inspección.

El Banco de España explica que, aunque el documento definitivo es el escrito de observaciones/requerimientos aprobado por la Comisión Ejecutiva, el objetivo de este texto es anticipar dichas situaciones, para que las acciones de corrección "se acometan sin demora".

En esta línea, propone que en las actuaciones de seguimiento 'in situ' se elabore semestralmente un informe resumen sobre los trabajos realizados, en el que se incluyan todos los ajustes y deficiencias observados, a partir del cual se propondrá a la Comisión Ejecutiva el correspondiente escrito de requerimientos u observaciones, en el que se incluirán todos los ajustes y deficiencias detectados en el semestre, incluidos los ya subsanados.

La institución además sugiere dar mayor formalidad al requisito del Banco de España, aprobado en octubre de 2011, de que cualquier discrepancia entre informes fuera informada a los superiores jerárquicos, incluso a la Comisión Ejecutiva. Para ello, propone incluir en un apartado específico en el Informe a la Comisión Ejecutiva de la Dirección General de Supervisión y en el Informe del departamento para el director general de supervisión sobre cualquier discrepancia.

El Banco de España ha defendido su labor como supervisor bancario, caracterizada "siempre por tratar de cumplir con los mejores estándares internacionales de rigor, independencia y calidad técnica, en un momento particularmente delicado en relación con la puesta en marcha de la supervisión única europea".

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