El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, se ha mostrado convencido de que el anterior equipo directivo no solicitará la devolución de las acciones que suscribió en la salida a Bolsa, porque hay "un caso claro de conflicto de intereses" y no entran en los supuestos de la propuesta desvelada hoy. Bankia ha presentado hoy su plan para que los pequeños accionistas recuperen a partir de este jueves el 100% de lo invertido en la salida a Bolsa, más un 1 % de interés anual, sin coste alguno y en aproximadamente quince días desde el momento en el que presentan la solicitud.
La entidad ha tomado esta decisión después de que el Tribunal Supremo publicara a comienzos de mes dos sentencias que echaban para atrás dos recursos de la entidad; según ha explicado Sevilla, el Supremo "da la razón a dos sentencias que Bankia había recurrido, pero no se pronuncia sobre el fondo de la cuestión", sobre la "regularidad" de la salida a Bolsa.
Creen que el anterior equipo directivo no solicitará la devolución de las acciones
Esas responsabilidades, ha dicho, son las que se están dirimiendo en la Audiencia Nacional, "y ahí son los jueces los que tendrán que hacer su trabajo". En total, Sevilla calcula que se podrán beneficiar de esta medida unos 200.000 pequeños ahorradores, entre ellos los trabajadores de la entidad, que acudieron a la oferta en julio de 2011, lo que le supondrá a Bankia un desembolso de entre 1.400 y 1.500 millones de euros.
Aparte, Bankia ha recibido 49 demandas de inversores institucionales, que no están incluidos en la propuesta presentada hoy, y que representan entre 70 y 73 millones de euros; Bankia va a recurrir si hubiera sentencias adicionales de inversores institucionales, porque entiende que "éstos no están amparados por el Supremo".
Por lo que respecta a los gastos en los que han incurrido aquellos accionistas que optaron por acudir a los tribunales, Sevilla ha dicho que "hay muchas situaciones diversas, muchos compromisos, en cada caso es distinto", y depende "de cada despacho de abogados", con lo que "cada inversor tendrá que decidir si la oferta presentada hoy por Bankia "le compensa o no, o si decide seguir por la vía judicial".
Si un pequeño accionista que ha iniciado un proceso judicial se acoge a la propuesta de Bankia, la entidad se dirige al juzgado correspondiente para pedir al juez que de por finalizado el proceso. En ese momento, los abogados de los reclamantes pueden solicitar el pago de costas y de los gastos en los que hayan incurrido durante el proceso, y ya será el juez el que decida la medida de esas costas y quién se hace cargo de ellas, ha explicado Sevilla.
En cuanto al interés compensatorio del 1 % anual, Sevilla ha explicado que se trata del mismo que se aplicó en el proceso de arbitraje de las participaciones preferentes; el cálculo se ha hecho de modo que estos inversores recuperen aproximadamente lo mismo que si hubieran invertido sus ahorros en un depósito a plazo.
El director de Banca Particulares, Fernando Sobrini, ha explicado que, en principio, esta operación no tiene repercusión fiscal sobre los inversores, siempre y cuando se hayan mantenido las acciones, aunque caso distinto, será el de aquellos que vendieron las acciones.
Sevilla ha señalado también que esta decisión se ha adoptado con conocimiento del FROB, principal accionista de Bankia. En su opinión, una vez que se de por finalizado el proceso es lógico pensar que "deje de tener impacto en la cotización", aunque los inversores son conscientes de que se ha provisionado lo necesario.
Sevilla no ha querido desvelar si, una vez finalizado el proceso de recompra de acciones, Bankia emprenderá un proceso de "contrasplit" o reagrupación de acciones, algo sobre lo que la entidad decidirá cuando concluya todo el proceso.