Bruselas alerta de que España se encuentra en "situación crítica" en pobreza infantil, exclusión social y abandono escolar

No es ninguna sorpresa que España encabece la lista siendo uno de los países con la tasa de pobreza infantil más alta de la Unión Europea. Conocíamos esta información en el informe 'Estado de la Infancia en la Unión Europea 2024', elaborado por UNICEF el pasado mes de febrero.

España se enfrenta a una de las crisis sociales más graves: la pobreza infantil. Según los últimos informes de la Comisión Europea y organizaciones como UNICEF, uno de cada tres niños vive en riesgo de pobreza o exclusión social, situando al país entre los peores de la Unión Europea.

La Comisión Europea ha emitido un informe sobre la situación social en España, calificando de "crítica" su posición en indicadores clave como el riesgo de pobreza infantil, la exclusión social y el abandono escolar. Según el análisis, en 2023, el 34,5% de los niños españoles vivían en riesgo de pobreza, una cifra que supera en casi 10 puntos porcentuales la media europea, que se sitúa en el 24,8%. Este dato coloca a España como el país con la mayor tasa de pobreza infantil dentro de la Unión Europea.

El informe también pone en manifiesto las prestaciones sociales, excluyendo pensiones, en la reducción de la pobreza es insuficiente. En España, estas ayudas solo lograron reducir la pobreza en un 22,9%, muy por debajo del promedio europeo del 34,7%. Esta situación pone de manifiesto la ineficacia del sistema actual para abordar adecuadamente la pobreza infantil. Además, persisten desigualdades regionales que dificultan el acceso a servicios públicos esenciales y contribuyen a una elevada tasa de pobreza entre trabajadores activos.

En cuanto al abandono escolar a temprana edad, aunque ha disminuido hasta el 13,7%, sigue siendo una de las tasas más altas de la UE y está muy por encima del promedio europeo del 9,5%. Estos problemas se agravan por una desigualdad en los ingresos, con una ratio del 5,5 entre los más ricos y los más pobres, frente al 4,7 de media europea. Por ello, la Comisión Europea insta a España a reforzar su sistema de protección social y a mejorar las políticas públicas para reducir estas brechas.

Uno de los países menos efectivos para combatir la pobreza

Los datos preocupan, ya que el 28,9% de los menores en España vive por debajo del umbral de pobreza, mientras que el 33,9% está en riesgo de pobreza o exclusión social, según el indicador AROPE del pasado mes de junio. Estas cifras colocan a España muy por encima de la media europea, que se sitúa en torno al 24%. Además, la incapacidad para cubrir necesidades básicas como mantener una vivienda a temperatura adecuada o garantizar una alimentación equilibrada afecta al 10,8% de los hogares con niños.

Otro es la pobreza energética, casi el 20% de los hogares con menores no puede mantener su vivienda a una temperatura adecuada durante el invierno. Esto tiene consecuencias para la salud física y mental de los niños, quienes son más vulnerables a enfermedades respiratorias.

A pesar de la gravedad del problema, España sigue siendo uno de los países europeos menos efectivos a la hora de reducir la pobreza infantil mediante transferencias sociales. Según datos del informe, estas ayudas solo logran reducir la tasa de pobreza infantil en 5,9 puntos porcentuales, frente al promedio europeo del 12%. En países como Irlanda o Finlandia, estas políticas consiguen reducir la pobreza infantil hasta en un 30%.

El gasto público destinado a políticas familiares y ayudas directas a la infancia es muy bajo en comparación con otros países europeos. Mientras que nuestro país invierte menos del 1% del PIB en este tipo de medidas, en Francia o Alemania destinan más del doble.

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