La Unión Europea pedirá a España como condición para recibir el rescate bancario de hasta 100.000 millones de euros pactado el pasado fin de semana que cierre las entidades problemáticas cuya quiebra no desestabilice la economía.
"No tenemos por qué salvar a todos los bancos si no es estrictamente necesario", ha asegurado un alto funcionario europeo. "Hay casos en que habrá que liquidar entidades", ha agregado.
Ningún banco con problemas recibirá ayuda hasta que no presente un 20120613-NEW-00028-false|||evitar al máximo que se utilice dinero público", de modo que "si hay entidades que deben quebrar, quebrarán". Bruselas cree que pude haber actores en el mercado, tanto nacionales como internacionales, interesados en adquirir activos en el mercado bancario español.
Aunque en estos momentos ninguna operación puede considerarse libre de riesgo, "hay inversiones que pueden ser prometedoras" porque la crisis terminará y el sistema financiero español resulta "interesante" por su proyección en otras regiones del mundo como América Latina.
"Puede interesar a los inversores que quieran apostar a largo plazo", señalan las fuentes. El secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, ha rechazado de plano este miércoles la posibilidad de que el Gobierno cierre algunos bancos en el marco de la reestructuración financiera, ya que lo que se hará tras recibir la ayuda será "algo muy parecido" a lo que se ha hecho hasta ahora desde el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).