La Comisión Europea ha dado este jueves por buenos los cambios asumidos por Google para cumplir con las exigencias europeas en materia de protección del consumidor, al tiempo que ha apuntado a Facebook y Twitter para reclamarles mayores esfuerzos.
"Es inaceptable que queden asuntos pendientes y se esté tardando tanto. Ello confirma la necesidad de un nuevo marco para los consumidores", ha declarado la comisaria de Justicia, Consumo e Igualdad, Vera Jourov, quien ha apostado por sancionar a las empresas que incumplan las reglas de la Unión Europea.
A raíz de las quejas recibidas de consumidores denunciando fraudes o estafas al usar este tipo de plataformas en Internet, Bruselas y los principales operadores de redes sociales acordaron cambios que las empresas deberían adaptar a sus prácticas antes de que acabe el primer trimestre de 2018.
Entre las medidas consensuadas con el sector destacan los cambios en las condiciones de servicio de las plataformas, por ejemplo aquellas que limitan o excluyen la responsabilidad de las redes sociales en relación con la prestación del servicio. También deben acabar con la exigencia a los usuarios de renunciar a los derechos que les asisten como consumidores de la Unión Europea, incluido el derecho a cancelar una compra realizada en Internet. Otras correcciones se refieren a defender el derecho del consumidor a acudir a los órganos jurisdiccionales de su Estado miembro de residencia frente a la obligación de someterse al Derecho de California (Estados Unidos). Tampoco gusta a Bruselas la condición que exime a la plataforma de la obligación de señalar las comunicaciones comerciales y los contenidos patrocinados.
Tras examinar los compromisos de cada sociedad, el Ejecutivo comunitario ha concluido que los cambios en Google "parecen ajustarse a lo pedido por las autoridades de consumo", mientras que en el caso de Facebook y Twitter sólo han resuelto "en parte" la asunción de responsabilidades y el modo en que se informa de la resolución de un contrato o de la retirada de un contenido.
En cuanto al procedimiento de notificación y acción que emplean las autoridades para solicitar la supresión de contenidos, la Comisión aprueba el protocolo con plazos diseñado por Google, pero critica que Facebook y Twitter sólo hayan aceptado facilitar un correo electrónico como canal de comunicación, sin compromiso de tramitar las peticiones de las autoridades recibidas en ese buzón.