Más de un centenar de empleados del aeropuerto de Madrid-Barajas se concentraron hoy ante la T2 para expresar su rechazo a la privatización de Aena y, coincidiendo con el fin del Carnaval, simularon la "muerte" y "entierro" del ente público por parte del Ministerio de Fomento.
Es la segunda "cacerolada" que convocan los trabajadores de Barajas en el marco de las movilizaciones acordadas en una asamblea de empleados, que decidió también realizar una acampada permanente en la T4 para recoger firmas contra la privatización de Aena.
Los trabajadores de Barajas quieren que el Ministerio de Fomento de marcha atrás en su plan privatizador y garantice que no perderán la condición de "empleados públicos, que los contratos temporales pasarán a ser fijos y que no se producirán despidos en las nuevas empresas concesionarias de los servicios".
Así lo explicó Abraham Escobar, representante de CGT, quien dijo que los trabajadores de Aena "están haciendo un gran esfuerzo para evitar el conflicto que ha provocado el Ministro de Fomento, José Blanco".
Según Escobar, se han recogido ya más de 15.000 firmas contra la privatización de AENA, que pretenden entregar hoy en el Ministerio de Fomento y en el Defensor del Pueblo. Escobar agregó que los trabajadores no se han movilizado por reivindicaciones laborales, sino "para defender derechos colectivos y la garantía y la calidad en el empleo".
La "cacerolada" de hoy fue convocada por CGT y Asobopa (Asociación de Bomberos), cuyo representante, Carlos Plaza, manifestó que los trabajadores del servicio de extinción de incendios rechazan la privatización porque afectará a la seguridad. Plaza opinó que "se supeditarán los criterios de seguridad a los intereses empresariales", y advirtió de que los bomberos pasarán a ser "vigilantes de seguridad, ya que no tendrán el deber de sacrificio que recoge el Código Penal y las nuevas compañías los podrán contratar y despedir a su antojo".
Recordó también que desde 1991 Aena "no cuesta un duro a los ciudadanos, ya que se financia con las tasas aeroportuarias y de Navegación Aérea".
Sobre la convocatoria de huelga para 22 jornadas entre abril y agosto que presentaron ayer los sindicatos CCOO, UGT y USO, Abraham Escobar anunció que la próxima semana los trabajadores de Barajas "decidirán si apoyan estos paros, y estudiarán la posibilidad de convocar nuevas movilizaciones".
Desde Asobopa, Plaza manifestó que en el aeropuerto de Barajas hay 150 bomberos "que no secundarán la huelga porque mientras haya un sólo avión en el aire estarán en sus puestos, aunque apoyarán la convocatoria de toda clases de movilizaciones para defender una Aena pública".