A las 11 comenzaba en Madrid una dura jornada para los familiares de las 154 víctimas de la tragedia de Spanair y también para los 18 supervivientes.
Flores en el monumento levantado junto al Parque Ferial Juan Carlos I donde hace cinco años fueron llegando uno por uno los cuerpos para su identificación.
Ha sido entonces cuando se han oído las primeras reivindicaciones de justicia de un caso que se encuentra en el Constitucional a la espera de que se depuren responsabilidades.
Casi a la misma hora, 154 rosas blancas eran lanzadas al océano Atlántico desde la playa de las Canteras y servían para recordar el día en que la vida se detuvo para muchos.
Junto al olivo que se plantó en la Terminal 2 de Barajas se ha hecho el silencio. La emoción y el recuerdo por lo ocurrido estaba en la mente de todos.
La presidenta de la Asociación de Afectados del Vuelo JK5022, Pilar Vera, ha solicitado ante la presencia de la ministra de Fomento, Ana Pastor, la unificación de las comisiones de investigación de accidentes de todos los medios de transporte en un solo organismo.
Durante su discurso, Vera ha destacado que solo con esta medida se podrá extraer de la tragedia el conocimiento para la seguridad de todos los usuarios.
La última parada, ya sin medios de comunicación, ha sido en la pista 36 L del aeropuerto, donde se estrelló la aeronave. Un momento privado para quienes siguen reviviendo cada día el horror de aquel 20 de agosto de 2008.