El Parlamento chipriota aprobó por unanimidad la creación de un Fondo Nacional de Solidaridad y la ley para restringir las transacciones financieras, dos de los pilares del denominado plan "B" de medidas alternativas al plan inicial del Eurogrupo sobre su rescate.
La votación se produjo sin debate previo y por ahora se desconoce si se votará hoy mismo la polémica tasa a los depósitos bancarios. El denominado "plan B" consta de un total de nueve borradores de ley y enmiendas a leyes en vigor, pero no incluye todavía la tasa a los depósito.
El objetivo del plan es reunir los 5.800 millones de euros que exige la troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional) a cambio del rescate de 10.000 millones de euros.
La serie de leyes contempla, entre otros, la creación de un Fondo Nacional de Solidaridad, la restricción del movimiento de capitales y la consolidación de las entidades financieras.
El 'plan B' consta de nueve borradores de ley y enmiendas a leyes en vigor
El texto legislativo sobre las restricciones a los movimientos de capital pretende evitar una fuga de depósitos en el momento en el que los bancos chipriotas reabran sus puertas, lo que está previsto para el martes.
Según esta ley, el ministro de Finanzas o el gobernador del Banco Central podrán establecer los límites por decreto, una medida que demandaba la delegación de la troika internacional presente en Chipre. Al denominado Fondo Nacional de Solidaridad se destinará parte de las reservas de los fondos de pensiones y del seguro médico de los empleados públicos.
El fondo estará abierto a las donaciones de ciudadanos y empresas privadas y podría incluir más adelante la oferta de la Iglesia de Chipre de hipotecar sus "inmensas propiedades" e incluso de posibles derivados financieros creados en base a las eventuales ganancias futuras de la extracción del gas. Este fondo tendrá la potestad de financiar bancos en dificultades e incluso al propio Estado chipriota a través de la emisión de bonos u otro tipo de productos financieros.
Reunión extraordinaria el domingo
Los ministros de Economía de la eurozona celebrarán el domingo una reunión extraordinaria para tratar de acordar el rescate de Chipre y evitar la bancarrota de la isla y su salida del euro. La reunión tendrá lugar un día antes de que venza el plazo que ha dado el Banco Central Europeo (BCE) para cortar la liquidez a los bancos chipriotas.
La Unión Europea ha anunciado este viernes que suspende la cumbre con Japón que iba a celebrarse en Tokio el próximo lunes. "Los esfuerzos en marcha para encontrar una solución para la situación financiera de Chipre requieren nuestra presencia en Bruselas", han dicho el presidente del Consejo, Herman Van Rompuy, y el de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, en un comunicado conjunto.
El Eurogrupo examinará si el 'plan B' para el rescate aprobado por el parlamento chipriota cumple las condiciones exigidas para desbloquear la ayuda.
En primer lugar, la UE quiere limitar la ayuda a la isla a 10.000 millones de euros -frente a los 17.000 millones de euros que pedía el Gobierno de Nicosia- El resto del dinero deberán aportarlo los propios chipriotas. La segunda condición es que la deuda de Chipre no deberá superar el 100% del PIB en 2020, el umbral que el Eurogrupo considera sostenible.
El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, ha dicho que no hay muchas alternativas a la tasa a los depositantes y ha pedido que se excluya a las cuentas de menos de 100.000 euros, cantidad garantizada por las normas de la UE.