Al parecer el Banco de España está al tanto de esta situación y le está exigiendo un plan de recapitalización y de saneamiento antes de que acabe el año, ya que la entidad podría tener un agujero de 600 millones de euros.
El banco de Valencia está integrado en el Banco Financiero y de Ahorros (BFA), matriz de Bankia. Hace unos días, su presiente, José Luis Olivas dimitió del cargo alegando que era incompatible con su posición en el grupo, dado que es vicepresidente ejecutivo de Bankia y del BFA.
Los títulos de la entidad han sido suspendidos antes de la apertura, sin que el organismo supervisor del mercado haya indicado cuándo volverán a cotizar. Las acciones de Banco de Valencia, integrada en Bankia, cerraron el viernes a 0,87 euros.