La Vicepresidenta Salgado ponía todo el esmero en explicar sobre la marcha, en los pasillos del Congreso, las claves del Impuesto de Patrimonio. Es decir, que el tributo ahora restablecido afectará a patrimonios superiores a los 700.000 euros, eso sí una vez restadas las deudas.
Y quedan exentas las viviendas habituales hasta un valor de 300.000 euros, entre el valor catastral del inmueble o su valor de compra, siempre el más alto. El impuesto, que se aplica individualmente y no por familias, será temporal, para los ejercicios 2011 y 2012.
El Gobierno calcula que serán 160.000 los contribuyentes que tendrán que volver a declarar por patrimonio. Pagarán una cantidad media próxima a los 7.000 euros.La recaudación prevista, 1.080 millones de euros adicionales por año.