39 trabajadores presentaron ayer bajas médicas en el aeropuerto de El Prat provocando, un día más, retrasos y cancelaciones en pleno verano. Hoy AENA y el sindicato de controladores se reúnen para intentar cerrar el nuevo convenio colectivo.
La media de los retrasos que sufrían ayer los vuelos en el aeropuerto de El Prat era de media hora, aunque algunos alcanzaban las dos horas de demora y, al menos, 9 vuelos fueron cancelados.
Eran las consecuencias de la falta a sus puestos de trabajo de 39 controladores aéreos. Todos ellos, con bajas médicas. Para Aena, se trata de una casualidad bastante sospechosa. Los sindicatos se defienden.
Tal y como marca la ley aprobada a principios de año, parte de la ausencias intentan suplirse, para tratar de minimizar los daños en el tráfico aéreo. Este nuevo conflicto a hecho que el Ministerio de Trabajo se plantee la posibilidad de revisar las prestaciones recibidas por incapacidad temporal para que no se usen de forma desaprensiva, mientras que el Ministro de Fomento advierte de que el asunto puede acabar en los tribunales. Desde el PP, sin embargo, le señalan a él como culpable.
Ayer, toda la franja mediterránea se vio afectada por la baja masiva de controladores aéreos. El sindicato de controladores y Aena se reúnen hoy para tratar de cerrar un nuevo convenio colectivo que podría poner fin a este último conflicto.
