Los bancos chipriotas no abrirán de nuevo sus puertas este martes, como estaba previsto, sino el jueves, 28 de marzo, según un cambio anunciado por el Banco Central de Chipre. Un portavoz del organismo regulador anunció que todos los bancos, "con la excepción del Laiki Bank y el Banco de Chipre", abrirían este martes. Según esta primera orden, las dos mayores entidades del país permanecerían cerradas hasta el jueves.
Finalmente, ninguna entidad abrirá antes del jueves. El Banco Central ha justificado este cambio en aras del "funcionamiento tranquilo de todo el sistema bancario".
El ministro de Finanzas ya avanzó previamente la necesidad de un día más de corralito para garantizar "el correcto funcionamiento del sistema bancario al completo" y aseguró que la nueva decisión se tomó "por recomendación del gobernador del Banco de Chipre".
En su mensaje a la nación, que ha durado ocho minutos, Nikos Anastasiadis, aseguraba haberse visto obligado a aceptar las drásticas medidas para evitar la bancarrota. Y anunció la creación de una comisión de investigación para depurar responsabilidades sobre esta crisis. Anastasiadis ha garantizado que las pensiones están a salvo en los bancos, donde sí habrá restricciones graduales, pero de carácter temporal. El objetivo es evitar la fuga de capitales.
Lo que no ha dicho es cuál será el porcentaje que se aplicará a los depósitos superiores a 100.000 euros. La quita podría ser finalmente del 30%.
Los dos citados bancos están afectados por el amplio plan de reestructuración acordado por el Eurogrupo, por lo que deberán esperan unos días en los que adaptarán su software a las exigencias del acuerdo alcanzado anoche. Los bancos de Chipre permanecen cerrados desde el sábado 16 de marzo, y desde entonces el único acceso a dinero en metálico ha sido a través de los cajeros automáticos, aunque con limitaciones en los importes. La decisión fue tomada tras recibir el visto bueno del Banco Central Europeo que mantuvo una reunión sobre la situación de las entidades financieras de Chipre.