El consumo medio de agua en los hogares españoles creció hasta 139 litros diarios por persona en 2014, pese a lo cual sigue siendo uno de los más bajos de Europa, según el IX Estudio Nacional de Suministro de Agua Potable y Saneamiento, presentado hoy en Madrid.
A la espera de los datos de 2015, el consumo medio se incrementó en 9 litros, aunque hay fuertes diferencias entre las poblaciones de distinto tamaño. Así, en las áreas metropolitanas de más de 100.000 habitantes, "se consume 107 litros diarios por persona, menos que la media de 2013" ha explicado José Carbonell, presidente de la asociación española de empresas gestoras de servicios de agua urbana (AGA), mientras que en las ciudades con población inferior se alcanza hasta 169 litros.
Carbonell cree que estas diferencias demuestran "la eficacia de los nuevos hábitos sociales de ahorro al tomar conciencia de un recurso natural limitado". La incidencia media de la factura del agua en el presupuesto familiar es de un 0,9 %, por debajo del 3 % marcado por la ONU como cifra límite de asequibilidad del Derecho Humano al Agua.
Paradójicamente, Dinamarca, Alemania, Suiza y Holanda son, por este orden, los países europeos más caros, duplicando los gastos de España "pese a que figure entre los que sufren mayor escasez de recursos hídricos en Europa".
El informe, impulsado por AGA y por la Asociación Española de Abastecimientos de Agua y Saneamiento (AEAS), también indica que el precio medio del agua para uso doméstico es 1,77 euros por metro cúbico, una tarifa que describe como entre las más bajas de las europeas.
Ambas organizaciones aseguran que estos precios no permiten cubrir el coste de los servicios "y en muchos sistemas sólo alcanzan a soportar los gastos operativos", debido sobre todo a la antigüedad de las estaciones de tratamiento y los depósitos de distribución.