Descubiertos al hacerse pasar por instaladores de butano

El viejo truco del butano vuelve a llamar a la puerta. Le ha ocurrido a Maria Asunción. Unos hombres llegan a su casa para hacerle la revisión del gas. Media hora después, los supuestos técnicos le dijeron el precio. Le pareció extraño y llamó a la Guardia Civil, quien le dijo que eran legales. tuvo que pagar casi 200 euros, todavía le da rabia cuando lo recuerda.

Esta vecina de Belchite, en Zaragoza, no es la única. Las asociaciones de instaladores recuerdan que la revisión del gas se hace siempre a petición del usuario.

Tampoco hay que fiarse si nos ofrecen un número de teléfono, ya que no tenemos la certeza de que estamos hablando con la empresa.

El consejo es el de siempre: nunca abra la puerta a desconocidos.