El Gobierno ha aprobado este viernes el nuevo Plan Estatal de Vivienda 2018-2021 con una dotación para los cuatro años de 1.443 millones de euros, un 62,5% más que en el plan anterior, según ha anunciado el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
En concreto, la dotación será de 350 millones para este año y se ampliará hasta los 357 millones en 2019, hasta los 364 millones en 2020 y hasta los 372 millones en 2021. El ministro ha afirmado que el número de ayudas en el periodo de vigencia del plan alcanzará las 557.109 ayudas y se crearán un total de 60.320 puestos de trabajo.
En cuanto al periodo de tiempo en el que se podrán empezar a solicitar las ayudas, el titular de Fomento ha afirmado que estas podrán ser recibidas en el momento en el que cada comunidad autónoma haya abierto las órdenes correspondientes. "En un plazo de dos o tres meses tienen que estar suscritos todos los convenios y abiertas todas las órdenes de ayudas", ha subrayado.
El plan, que se aplicará con efecto retroactivo al 1 de enero, contempla ayudas al alquiler y a la compra para menores de 35 años y facilita el acceso a la vivienda en las zonas afectadas por la despoblación rural con ayudas a la compra y al alquiler para jóvenes que viven en municipios de menos de 5.000 habitantes.
También integra un programa para alquilar viviendas desocupadas propiedad de entidades financieras a personas en situación de desahucio y un nuevo programa para fomentar la construcción de viviendas destinadas al alquiler, que se extiende a las promociones privadas por primera vez.
El nuevo plan de vivienda, si bien estará enfocado al alquiler, contempla una ayuda a la compra de vivienda de hasta el 20% del precio del piso que se adquiera (con un máximo de 10.800 euros) para jóvenes de menos de 35 años e ingresos inferiores a tres veces el IPREM.
En cuanto al alquiler, las medidas se dirigen también a estos jóvenes, a mayores de 65 años y personas afectadas por desahucios, que podrán recibir ayudas de hasta el 50% del importe del alquiler de un piso.
Para rentas mensuales de hasta 900 euros
Además, esta ayuda al alquiler se podrá pedir para viviendas que supongan rentas mensuales de hasta 900 euros, frente al máximo de 600 euros fijado en el anterior plan, para adecuarlo así al encarecimiento de este tipo de vivienda.
De su lado, las personas afectadas por desahucio contarán con hasta 400 euros al mes para pagar un alquiler, y los mayores podrán contar también con ayudas de hasta 200 euros mensuales para atender el pago de facturas de suministro (agua, luz, gas o de comunidad). El plan se completa con iniciativas dirigidas a la promoción de viviendas para alquiler y para la rehabilitación de pisos y zonas urbanas.