Financiación

Emiliano García Page se une a las comunidades del PP para rechazar la "financiación singular" que exige Cataluña

El último dardo en forma de aviso que Emiliano García Page ha lanzado advierte, "tenemos quién se quiere quedar con las llaves de la caja" y si eso ocurre "nos quejaremos y nos denunciaremos".

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-PageEfe

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Día señalado en rojo para todas las comunidades autónomas. El Consejo de Política Fiscal y Financiera celebra hoy una reunión a la que los territorios llevarán sus demandas en materia de financiación pero también sus líneas rojas, sobre todo tras las últimas semanas en las que la reclamación de Cataluña para tener un modelo singular se ha establecido como telón de fondo.

La reunión parte de la convocatoria de Hacienda, el departamento dirigido por María Jesús Montero quiere abordar la senda de déficit y deuda para los siguientes tres años y el reparto de las entregas a cuenta para 2025, pero los consejeros no desaprovecharán la oportunidad para dejar clara su postura en materia de financiación, más cuando hasta se ha confirmado ya la presencia de la consellera catalana Natàlia Mas que pretende defender la "financiación singular" para salir de un régimen común de "hace 40 años" que genera una "insuficiencia crónica de recursos" y tener plena "soberanía fiscal" o, como repite, "la llave de la caja".

Frente a esta postura las autonomías del PP han encontrado un aliado socialista, el castellanomanchego Emiliano García-Page acude con la idea de que la financiación "no se pueda trocear ni pueda servir de arma arrojadiza", para lo que plantea un pacto de Estado que incluya al PP y a "todas las administraciones posibles". Precisamente en este sentido transmitió al presidente del Gobierno que la riqueza "es del conjunto de España" y no es posible "trocearla por regiones y servir de arma arrojadiza". De esta manera, mantiene su adhesión "por completo (...) a la propuesta que se hace en el ámbito nacional" para mejorar la financiación autonómica, que "a la postre tiene que ver con cómo se gestiona la sanidad, la educación o los servicios sociales".

Andalucía se oponen rotundamente a "cualquier privilegio" y "cualquier negociación bilateral" entre el Gobierno y una única comunidad autónoma.

Baleares exigirá más autonomía tributaria para establecer una política fiscal propia y una compensación mayor de los perjuicios de la insularidad para la competitividad del archipiélago, y Castilla y León defenderá "igualdad, solidaridad y multilateralidad", sin pactos bilaterales y "sin ningún tipo de privilegios".

Siempre que se mantenga la premisa de que reformar el sistema de financiación es necesario pero no se hagan negociaciones bilaterales, la Comunidad Valenciana y Galicia se mostrarán con voluntad de diálogo.

Una escala por debajo, la Comisión Nacional de Administración Local se reúne para tratar con los municipios asuntos como la financiación y las reformas normativas que demandan los ayuntamientos. La presidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias, María José García-Pelayo, acudirá convencida que será "decepcionante" porque el Gobierno ignora "los problemas reales" de la financiación municipal y ha convocado esta cita "única y exclusivamente para cumplir el trámite legal".

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