La vicepresidenta y portavoz del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha avanzado que el Ejecutivo creará una autoridad fiscal que gozará de "plena autonomía e independencia" y que tendrá como objetivo garantizar el principio de estabilidad presupuestaria que marca el artículo 135 de la Constitución.
"No estará sujeta a las instrucciones del Gobierno", ha señalado Sáenz de Santamaría en la rueda de prensa posterior al Consejo, donde ha dicho que figura será similar a otras que existen en países como EE.UU. Según la portavoz, será un ente público, diferente de la Administración, que asumirá funciones de análisis, asesoramiento y seguimiento de la política fiscal y de la variación de las previsiones macroeconómicas para garantizar el cumplimiento "efectivo" de las diferentes administraciones.
Para aprobar su creación, el Gobierno desarrollará una ley orgánica y dotará a la autoridad de personalidad jurídica propia y plena capacidad pública y privada. Además, contará con un régimen patrimonial y de contratación propio del sector público y, conforme al principio de máxima transparencia, hará públicos todos los informes que redacte.
Según Sáenz de Santamaría, el Gobierno pretende así dar cumplimiento a las exigencias europeas al crear un órgano que quiere colocar "a la vanguardia" de las instituciones fiscales. Así, su principal tarea, "desde la independencia y la neutralidad", será asesorar e informar de la evolución de las previsiones económicas y del cumplimiento de los principios de estabilidad incluidos en la Constitución.
El Consejo de Ministros ha estudiado el informe con las principales líneas de esta autoridad laboral que servirá para elaborar un anteproyecto de ley que pasará por la Comisión de secretarios de Estado y subsecretarios para ser después remitido al Consejo de Ministros para su aprobación "lo antes posible".