El Ministerio de Industria ha propuesto subir los peajes de acceso, la parte del recibo de la luz que fija el Gobierno, un 12,5 % para la mayoría de los hogares y pequeños comercios, un 9 % para el resto de los consumidores de baja tensión y un 2 % para los grandes consumidores industriales.
Así se recoge en la propuesta de orden ministerial que Industria ha remitido a la Comisión Nacional de la Energía (CNE) por la que se revisan las tarifas de acceso, que retribuyen costes regulados como el transporte, la distribución o las primas a las renovables. Las subidas contempladas en el documento contrastan con la decisión del ministerio que preside Miguel Sebastián de congelarlas en las revisiones de la luz de octubre y diciembre.
Además de cubrir los costes regulados, los peajes sirven para retribuir el llamado déficit tarifario, el desajuste que se produce cuando los ingresos del sistema eléctrico obtenidos vía recibo de la luz no cubren todos los costes que soporta el sistema. El desequilibrio acumulado supera ya los 20.000 millones de euros.
En el caso de la tarifa de último recurso (TUR), a la que pueden acogerse usuarios con potencias inferiores a los 10 kilovatios (hogares y pymes), los peajes representan cerca de la mitad de la tarifa eléctrica, junto a los impuestos y el precio de la energía, que se determina mediante subastas trimestrales. Está previsto que el próximo 22 de marzo a las 09:00 horas se celebre la subasta Cesur en la que se fijarán los precios de la energía eléctrica para el segundo trimestre del año.
La cantidad a subastar ascenderá a 6.387 megavatios (MW) de potencia, de los que 5.981 corresponderán al producto base, y los 406 MW restantes, al producto punta. La tarifa eléctrica para el periodo abril-junio dependerá fundamentalmente de los peajes de acceso que fije el Gobierno y del resultado que arroje la subasta de energía, que tiene en cuenta la evolución de los precios de las materias primas, entre ellas del petróleo. Sebastián ha recalcado en numerosas ocasiones que la subida del 10 % en enero de la tarifa de último recurso (TUR) fue "excepcional e irrepetible".
La propuesta de orden ministerial sostiene que, teniendo en cuenta los costes y los ingresos previstos del sistema eléctrico y si se cumplen los objetivos de reducir en 4.616 millones los costes del sistema eléctrico para los próximos tres años, el déficit tarifario desaparecerá en 2013.