El Indice de Precios de Consumo (IPC) subió un 0,9% en octubre respecto al mes anterior, pero recortó dos décimas su tasa interanual, hasta el 1,6%, según los datos definitivos publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El organismo estadístico, que confirma de este modo los datos avanzados a finales del mes pasado, ha explicado que en el comportamiento de la tasa interanual del IPC de octubre han influido los precios de las gasolinas, de las prendas de vestir y de la electricidad, que subieron menos que en octubre de 2016, así como el abaratamiento del gas, del transporte aéreo y de los automóviles.
La tasa interanual de octubre es la decimocuarta positiva que encadena el IPC interanual e implica que los precios son hoy un 1,6% superiores a los de hace un año.
El IPC interanual arrancó el año en el 3%, su tasa más alta desde octubre de 2012. En febrero se repitió el mismo porcentaje, pero en marzo, por primera vez en siete meses, la inflación recortó su tasa interanual hasta el 2,3%.
Tras varias subidas y bajadas posteriores, el IPC interanual se situó en agosto en el 1,6%, una décima más que en julio, y escaló hasta el 1,8% en septiembre. De esta forma, con el retroceso registrado en octubre, la tasa interanual del IPC desciende tras dos meses consecutivos de alzas.
En el décimo mes del año, el Indice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) redujo una décima su tasa interanual, hasta el 1,7%, al tiempo que la variación mensual se situó en el 0,6%. En términos mensuales (octubre sobre septiembre), el IPC subió un 0,9%, ligeramente por debajo de lo que lo hizo en el mismo mes de 2016, cuando aumentó un 1,1%.
La inflación subyacente, que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos no elaborados, bajó en octubre tres décimas, hasta el 0,9%, situándose siete décimas por debajo de la tasa general del IPC.
En el retroceso del IPC interanual de octubre ha influido la bajada en más de un punto, hasta el 2,2%, de la tasa de transporte, motivada por la menor subida de los carburantes respecto a hace un año y el descenso de los precios del transporte aéreo y de los automóviles.
También ha contribuido la disminución en una décima, hasta el 0,5%, de la tasa de vestido y calzado, y la bajada en siete décimas, hasta el 2,2%, de la tasa de vivienda debido al abaratamiento del gas y al hecho de que los precios de la electricidad subieron menos que en octubre de 2016.