La inflación aumentó una décima en diciembre respecto al mes anterior y cerró 2013 en el 0,3%, marcando así la tasa anual más baja desde que se comenzó a elaborar la serie histórica en el año 1961, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La inflación de diciembre es una décima superior al dato que adelantó el INE hace dos semanas y es consecuencia del aumento de los precios de los carburantes y lubricantes para el transporte y del gasóleo para la calefacción de las viviendas.
La tasa de inflación subyacente -que excluye la evolución de los precios de la energía y los alimentos- disminuyó dos décimas en diciembre y se situó en el 0,2%, de forma que se encontró por debajo del IPC general.