La Bolsa de Milán ha vivido una jornada de mucha volatilidad y ha acabado con pérdidas del 2,08 %, mientras que la prima de riesgo italiana ha cerrado en 234 puntos básicos, frente a los 210 del viernes, por la incertidumbre política en el país. El jefe del Estado, Sergio Mattarella, se mantuvo el domingo firme en su veto a la figura del euroescéptico Paolo Savona, de 81 años, como ministro de Economía por su postura crítica contra el euro y como consecuencia el jurista Giuseppe Conte renunció al encargo de intentar formar un Ejecutivo.
Mattarella encargó esta tarea al exdirigente del Fondo Monetario Internacional (FMI) Carlo Cottarelli, quien en los últimos meses ha sido muy crítico con el programa político que querían impulsar el Movimiento Cinco Estrellas (M5S, antisistema) y la Liga (ultraderecha) por los enormes gastos que comportaría a las arcas estatales. Cottarelli deberá presentar su Ejecutivo en las próximas horas y después intentar lograr la confianza en el Parlamento, algo que se antoja difícil ya que el M5S y la Liga suman mayoría en ambas cámaras.
En su comparecencia ante los medios, Corrarelli avanzó que si no consigue esta confianza el Gobierno dimitirá y seguirá solo para las funciones urgentes hasta que se convoquen nuevas elecciones después de agosto. Este vuelco en el panorama político italiano, tras 85 días sin Gobierno, ha generado una gran división entre los partidos políticos y en la opinión pública, un clima de nerviosismo que se ha visto reflejado en el mercado bursátil milanés.
La bolsa milanesa comenzó con alzas por encima del 1,4 %, pero pronto tornó a terreno negativo y ha fluctuado entre subidas y bajadas durante toda la sesión, llegando incluso a sobrepasar las pérdidas del 2,5 % en algunos momentos. Solo tres valores de los cuarenta que cotizan en el selectivo se han salvado de los números rojos: la textil Moncler (+ 0,56 %), la aseguradora Unipolsai (+ 0,53 %) y la marca automovilística Ferrari (+ 0,44 %).
La banca ha sido el sector más golpeado y las mayores caídas han sido para Finecobank (-7,22 %), Banca Generali (-6,73 %), Banco Bpm (-6,58 %), Mediobanca (-6,08 %), Bper Banca (-5,84 %), Ubi Banca (-5,41 %), Unicredit (-3,83 %) e Intesa Sanpaolo (-3,24 %). Por su parte, el rendimiento del bono a diez años ha terminado en el 2,684 % y la prima de riesgo, que mide el diferencial entre el bono alemán a diez años y el italiano en el mismo periodo, ha acabado en los 234 puntos básicos, frente a los 210 del pasado viernes.
El líder del populista M5S, Luigi Di Maio, ha mostrado su rechazo a la decisión de Mattarella y ha llamado a la movilización pacífica. "Sé que estáis enfadados. (...) No podemos quedarnos mirando, debemos reaccionar rápido y con firmeza", dijo Di Maio, en un vídeo colgado en la red social de Facebook, a la vez que cargó contra quienes decían que los inversores tenían miedo de un Gobierno formado por su formación antisistema y la ultraderechista Liga. "Eso de los mercados es una mentira. Los mercados están preocupados por la incertidumbre, por la inestabilidad. Si hubiera nacido un gobierno político con unas ideas claras no habría habido ningún problema", subrayó.
También el cofundador del M5S, Beppe Grillo, transmitió un mensaje similar en otro vídeo en el que dijo que "el mercado de hoy es el pseudónimo del capitalismo más desalentador y depredador que hay en Italia". Por su parte, el líder de la Liga, Matteo Salvini, pidió que se convoquen elecciones lo antes posible y envió un mensaje a sus socios coaligados, Forza Italia y Hermanos de Italia, para advertirles de que no voten en el Parlamento a favor de la confianza del Gobierno de Cottarelli.
Forza Italia ya ha dicho en un comunicado que no secundará el Ejecutivo liderado por esta figura designada por Mattarella. Desde el gubernamental Partido Demócrata (PD), que ha gobernado en los últimos cinco años, se han sucedido las muestras de apoyo hacia el jefe del Estado. El secretario general regente de esta formación, Maurizio Martina, ha valorado que Mattarella ha defendido "la soberanía italiana" y el ministro saliente de Desarrollo Económico, Carlo Calenda, ha considerado que "el discurso del presidente Mattarella representa lo mejor de Italia".
El exsecretario general del PD y ex primer ministro de Italia Matteo Renzi ha subrayado que el país se encamina hacia nuevas elecciones, una cita que ha planteado como "una batalla increíble entre quien quiere salir de Europa y quien quiere una Italia fuerte dentro de Europa".