Ley de Vivienda

La Ley de Vivienda aumenta la demanda de los seguros de impago

Loa seguros de impago aumentan ante la necesidad de algunos propietarios de sentirse protegidos.

Vista de un escaparate de una inmobiliaria en Madrid

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Con la nueva Ley de Vivienda, los propietarios ya no pueden requerir los gastos de la agencia inmobiliaria a los inquilinos. Pero ahora, en muchos casos, se les pide a estos últimos el importe del seguro de impago. "En el último mes, hemos recibido hasta un 80% más de consultas en temas relacionados con la ley", explica José Luis Tirador, director comercial de Allianz Partners.

Además, desde la compañía aseguran que han recibido un mayor número de contrataciones respecto a años anteriores. El seguro de impago surge de la necesidad de los propietarios de sentirse seguros y protegidos ante posibles eventualidades por parte de los inquilinos, que los lleven a no poder cobrar el alquiler.

Con su contratación, se les ofrece a los arrendadores garantías para cubrir la renta. De esta forma, en el caso de que se produzca un impago, la renta del inquilino se cubre durante el período que tenga contratada la póliza. Se trata de un servicio dirigido, sobre todo, a pequeños propietarios y no tanto a grandes tenedores. Su precio suele rondar entre los 200 y los 2.000 euros, dependiendo del importe del alquiler de la vivienda.

¿Quién debe abonar esta cuantía?

"Jurídicamente, no está definido que sea el inquilino o el propietario. Nosotros siempre contratamos con el propietario porque es el que tiene el riesgo. Pero cualquier pacto entre ambos podría ser perfectamente válido", asegura Paz Tejero, responsable del departamento de asistencia jurídica y legal de Allianz Partners.

Independientemente de si es abonado por el propietario o por el inquilino, con el seguro de impago se incrementa la confianza por parte de los pequeños propietarios. Como consecuencia, aumenta la oferta de viviendas en alquiler y, por tanto, bajan los precios.

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