Los trabajadores de Alcoa San Cibrao realizan este lunes una carrera simbólica de 1.000 kilómetros, uno por cada puesto de trabajo amenazado entre el personal de la empresa y auxiliares.
Después de que el domingo fuesen a votar con el uniforme de trabajo, este lunes siguen con las movilizaciones para reclamar al Gobierno una intervención de la planta y que la empresa paralice el ERE por el que se despedirá a 534 empleados directos.
Así, desde las 8:00 horas se dio la salida a esta carrera por turnos en el entorno de la fábrica. El comité organiza estas movilizaciones en un escenario marcado por el brote de coronavirus en A Mariña, en donde la mitad de los municipios de la comarca siguen cerrados.
Lo hacen, aseguran, para visibilizar el impacto que tendrá sobre la comarca de A Mariña ese ERE. Alcoa supone más del 30% del producto interior bruto de Lugo. Esta semana se retoman las negociaciones.
Además, este martes los trabajadores prevén llevar a cabo una movilización sorpresa con motivo del debate de una propuesta del BNG en el Congreso sobre el futuro de Alcoa.
Votaron con sus trajes de faena
Decenas de trabajadores de Alcoa acudieron a votar en las elecciones autonómicas de este domingo en diferentes municipios de A Mariña ataviados con sus trajes de faena para reivindicar la continuidad de la factoría, de la que depende buena parte de la economía de la comarca.
En Foz -uno de los municipios afectados por las restricciones ante el brote en A Mariña-, los trabajadores y sus familias fueron a votar para, posteriormente, dirigirse a una cafetería cercana portando una pancarta que rezaba “ahora más que nunca, con los comercios y la hostelería de la comarca”.
