Son muchas las personas desempleadas a las que se les acabó la prestación del paro durante el confinamiento. Más de medio millón de españoles no pudieron buscar trabajo durante la cuarentena, y tampoco obtenían ningún ingreso. Ahora, están pendientes de que el Gobierno apruebe para ellos una ayuda de 430 euros.
A finales de agosto, el Ministerio de Trabajo y los agentes sociales concretaron un nuevo subsidio extraordinario para los 550.000 parados en todo el país. Una ayuda de 430 euros a percibir durante un periodo de 3 meses. Pero muchos ya han agotado ese subsidio, y están a la espera de que el Ejecutivo les dé una solución.
Ahora, una vez aprobada la cuarta prórroga de los ERTE, Trabajo prevé reanudar las conversaciones para este tipo de subsidio antes de finalizar el mes de octubre y así, ofrecer esa dotación a los parados que no obtienen ahora ningún ingreso.
Casos personales: sin ayudas ni prestaciones
Miguel Ángel Martínez, barcelonés de 44 años, lleva 2 sin trabajo. A final de este mes, el SEPE no le ingresará ninguna prestación.
La llegada del coronavirus llegó a la vez que su fin de prestaciones. Una depresión le obligó a dejar su empleo en una ludoteca, y ante la falta de ingresos, se vio obligado a dejar su piso y volver a vivir con su madre. Por ese motivo, Miguel Ángel asegura que no le admiten la prestación.
"Toda ayuda viene bien, pero si a mi durante tres meses me pagan 430 euros y luego se acaba esa ayuda, no me arregla nada. Yo lo que quiero es trabajar, sentirme útil", lamenta.
Como el caso de Miguel Ángel hay muchos otros.
Vicente es una de las muchas personas que se quedó en paro en pleno confinamiento. No pudo buscar trabajo durante la cuarentena y agotó su prestación, por lo que a la espera de que el Gobierno les dé una respuesta, vive de sus ahorros.
La misma situación que vive Pilar, de 50 años, que lleva sin trabajar un año. "Está todo muy paralizado y encontrar trabajo se ha convertido en una aventura", critica. O de Elisabeth, sin trabajo desde finales de febrero y con una ayuda de 430 euros por estar a cargo de su hija, aunque su plazo vencerá el próximo enero.