El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, ha defendido este miércoles en el Pleno del Congreso su proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado de 2018. Durante su comparecencia, Montoro ha subrayado que la política económica y laboral del Gobierno ha conseguido convertir una recesión en crecimiento.
"Hemos frenado la caída y la destrucción de puestos de trabajo como nunca", ha dicho al tiempo que ha valorado que la reforma laboral haya hecho "más cercana la negociación colectiva a la realidad que viven las empresas" y haya facilitado "la intensa creación de empleo de carácter indefinido".
Montoro ha apoyado unas cuentas públicas que contemplan acuerdos como la subida del Salario Mínimo Interprofesional o con la Función Pública así como con las administraciones y los gobiernos municipales y autonómicos para poder reutilizar su superávit. El ministro ha explicado que el objetivo de estos Presupuestos es distribuir los beneficios del crecimiento económico y cerrar el legado de la crisis económica para abrir una nueva etapa de prosperidad y bienestar.
Ha afirmado que a partir del trabajo realizado en los últimos seis años de Gobierno "España se asoma a un futuro de los más esperanzadores de su historia". "Hoy está en marcha un crecimiento económico que es el más sólido y sano de la historia que no hemos conocido nunca en nuestro país y que se traduce directamente en la creación de empleo", ha aseverado.
Para poder aprobar los presupuestos el ejecutivo debe contar con el apoyo del PNV. Sin los cinco diputados vascos, el Gobierno no sumará los votos suficientes para rechazar el jueves las enmiendas de totalidad de los grupos parlamentarios que reclaman la devolución de las cuentas y que suman la mitad exacta de la Cámara: PSOE, Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea, Esquerra Republicana (ERC), PDeCAT, Compromís, EH-Bildu y Nueva Canarias.
Este escenario obliga al PP a que todas las demás fuerzas parlamentarias voten en contra de las enmiendas de totalidad para forzar el empate y continuar así la tramitación del proyecto. Es decir, al Gobierno no le sirven las abstenciones.
Los apoyos a las cuentas
Para esa votación, el Gobierno tiene ya atados los apoyos de Ciudadanos, Coalición Canaria y sus socios electorales de Foro Asturias y UPN, aunque estos últimos aún no han dado el 'sí' definitivo a las cuentas.
El PNV, por el momento, sólo ha renunciado a presentar enmienda de totalidad, pero no ha dado por hecho que votará en contra de devolver el proyecto del Gobierno.
En todo caso, en las filas 'populares' interpretan que esa renuncia es una señal de buena voluntad para continuar la tramitación. Con empatar a 175 votos en la votación de este jueves, el Gobierno ya contaría con apoyos suficientes para superar ese primer escollo parlamentario y poder controlar su tramitación tanto en fase de ponencia como en la Comisión de Presupuestos, donde no está toda la oposición.
Si los Presupuestos concluyen con éxito su tramitación en el Congreso, empezarán a debatirse ya en junio en el Senado, donde seguirán el mismo procedimiento si bien en la Cámara Alta el PP se garantiza la aprobación al contar con mayoría absoluta.
El pelo de Montoro, la anécdota del debate
El debate ha dejado una anécdota al bromear Montoro sobre su pelo en comparación con la coleta del líder de Podemos, Pablo Iglesias, lo que ha provocado las risas de todos los diputados. Así ha sido la secuencia: