La morosidad del crédito concedido por la banca en España a hogares y empresas subió en enero al 10,78%, ligeramente más alta que el 10,44% registrado el mes anterior y más de dos puntos y medio por encima del 8,13% de enero de 2012.
De esta forma, la morosidad retoma la senda ascendente tras cerrar el año 2012 con el primer descenso después de diecisiete meses de subidas, que lo situó en el 10,44%, su tasa más baja desde julio de 2012, debido en gran parte al traspaso de activos tóxicos de las entidades financieras a la Sareb.
Según los datos provisionales publicados por el Banco de España, la cartera crediticia de bancos, cajas, cooperativas y establecimientos financieros de crédito era al cierre del primer mes del año de 1,583 billones de euros, frente a los 1,604 billones del mes anterior, recorte que el organismo atribuyó a la transferencia de activos a la Sareb y no a una disminución del flujo de crédito.