La morosidad de los créditos concedidos por bancos, cajas, cooperativas y establecimientos financieros de crédito (EFC) a particulares y empresas alcanzó en julio el 9,86%, con lo que marca un nuevo máximo histórico desde que el Banco de España recopila estos datos.
Esta tasa de impago ahonda en el nivel más alto registrado en junio (9,42%) y marca una brecha de 0,44 puntos porcentuales respecto al máximo hasta ese mes, febrero de 1994, cuando se estableció en el 9,15%. También supone un aumento de casi tres puntos respecto a julio de 2011 (6,93%).
Los créditos morosos totales del sector financiero español crecieron en casi mil millones en julio, un mes después de que España solicitara el rescate bancario a la Unión Europea, y alcanzaron los 169.330 millones de euros sobre una cartera crediticia de 1,716 billones de euros.