El negocio en auge de vaciar casas: mercadillos domésticos descubren tesoros ocultos y alivian conflictos familiares

Son empresas especializadas en vaciar casas que se alquilan o se ponen a la venta. Puede resultar estresante no saber qué hacer ni a quién recurrir para deshacerse de los objetos acumulados durante años o incluso toda una vida.

Lo primero es realizar un inventario de todo lo que hay en el interior de la vivienda; los objetos se valoran y tasan. Se vende absolutamente todo: desde el mobiliario, como sillas, mesas, cómodas, lámparas, adornos, tazas, vajillas, cacerolas y electrodomésticos, hasta plantas e incluso las pertenencias más personales del propietario, como ropa, calzado y complementos. Para los objetos más valiosos, se recurre a expertos como anticuarios, que estudian y tasan las piezas.

Muchas familias desconocen realmente el valor de algunas de sus pertenencias, especialmente cuando se trata de joyas, pinturas, esculturas u objetos curiosos vinculados a acontecimientos históricos.

En Antena 3 Noticias, hablamos con Blanca de Carlos, directora de 'Espacio en Claro', una empresa que nació hace siete años. Esta decoradora regresó de Estados Unidos con la idea de introducir en España la tendencia de las "Estate sales". "Viví varios años en Virginia (EE. UU.) y allí tuve mi primer contacto con este tipo de mercadillos. Ahora, esa cultura de adquirir objetos de segunda mano y darles una nueva vida está comenzando a consolidarse aquí", comenta Blanca.

Estas viviendas, convertidas en auténticos mercadillos, ofrecen todo su contenido a precios muy accesibles. Hay opciones para todos los bolsillos, pero en su interior también se pueden encontrar auténticas maravillas, tesoros que ni el propio propietario conocía. A veces, estos objetos son recuerdos que han pasado de generación en generación sin haber sido nunca tasados.

Por eso, muchas familias se llevan sorpresas al descubrir que algo que han tenido durante años tiene un valor considerable. "Una de las piezas más valiosas que encontré fue un Cristo de marfil valorado en 3.000 euros. En otra ocasión, hallé un traje de torero goyesco muy peculiar. Al abrir puertas de armarios y cajones, te adentras en habitaciones y descubres cosas inesperadas. Los objetos que encontramos nos revelan cómo eran sus dueños", cuenta Blanca.

Raquel Moreno, anticuaria y colaboradora de Blanca, trabaja mano a mano con ella para identificar hallazgos que en ocasiones resultan ser auténticos "tesoros". "Mi trabajo consiste en descubrir joyas y objetos valiosos, diferenciando lo bueno de lo menos importante. Después, contactamos con el tasador experto que fija el precio. Me encanta encontrar pistas en los objetos, porque al final construyen una historia que le da sentido al valor económico", explica Raquel.

Durante el reportaje, hablamos con Sandra, hija de la propietaria de la vivienda que está siendo vaciada. Los objetos y recuerdos pertenecieron a su madre. Entramos con ella en una de las habitaciones donde se exhiben bolsos, ropa, zapatos y bisutería que su madre lució en muchas ocasiones.

"Para mis hermanos y para mí, todo esto tiene un gran valor emocional. Veo estas prendas y accesorios, y visualizo a mi madre. Pero son cosas que ya no necesitamos, preferimos que otras personas las disfruten y les den una segunda vida. Además, este servicio de 'Espacio en Claro' evita muchos conflictos familiares. Si una empresa objetiva valora los objetos, todos ganamos y nos beneficiamos de lo que se venda", afirma Sandra.

Blanca de Carlos no trabaja sola. Ha sabido rodearse de un equipo que la ayuda en todo el proceso desde el primer momento. Seleccionar la casa y valorar lo que hay en su interior es clave para el éxito en la venta. Blanca y su equipo se llevan el 30% de las ventas que realizan. Los mercadillos en las casas son un negocio en auge, que dio sus primeros pasos poco antes de la pandemia y que hoy se consolida con fuerza en nuestro país.

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