Pagar menos por un coche eléctrico será posible, ¿cuándo será una realidad?

El coche eléctrico puede ser una gran solución en numerosos aspectos, pero también cuenta con importantes trabas. Una de ellas -y tal vez la más importante- es que se trata de un producto caro, lo que deriva en que un alto porcentaje de la población no puede afrontar su compra.

Sin embargo, la solución podría llegar muy pronto de la mano del masivo desembarco de marcas chinas en Europa, pero también por las propuestas de muchas otras firmas que pretenden abaratar el coche eléctrico. Además, estos quieren ser alternativas plausibles al coche de combustión de la mano de un precio de adquisición similar o incluso más bajo.

¿Cómo es posible que las marcas chinas abaraten el sector de los coches eléctricos?

La principal ventaja de las firmas procedentes de China reside en que no tienen problemas de microchips. Por otro lado, los fabricantes chinos están situándose en una posición mucho más competitiva con unos costes de producción inferiores y, sobre todo, el acceso directo a la tecnología del vehículo eléctrico - especialmente baterías y la materia prima necesaria para producirlas.

Con todo ello, el precio de fabricación de un coche se reduce drásticamente, pero también los tiempos de espera. Y es que, de esta manera, las marcas chinas pueden contar con un stock gigantesco y reducir la espera de entrega de coches a unas semanas frente a fabricantes europeos que están dando esperas de meses.

Además, la expansión y nacimiento de marcas chinas no solo permite al potencial cliente tener más donde elegir, sino también plantearse como una opción lógica frente a marcas europeas. De esta manera, podremos optar por coches eléctricos más baratos y de todos los segmentos y con todo tipo de precios, logrando así una mayor globalización de este sector y también una mayor equiparación con el mercado de coches de combustión.

Las marcas europeas no quieren quedarse atrás con el coche eléctrico barato

Pero lógicamente Europa, consciente del terreno que están afincando las marcas chinas, ha decidido tomar cartas en el asunto. Y concretamente son dos marcas las que han pisado el acelerador hacia ese coche eléctrico barato, siendo Volkswagen y Renault las más cercanas a ofrecerlo.

Por un lado, Volkswagen con el ID.2 All, un vehículo que de momento se encuentra en fase conceptual pero que ya adelanta bastante de su variante de producción. Sin embargo, y pese a su diseño moderno y rompedor, el punto álgido reside en el precio que ya ha prometido la firma de Wolfsburgo. Y es que desde Volkswagen aseguran un precio inferior a los 25.000 euros para la configuración de acceso, un precio de partida inferior incluso al de la mayoría de coches eléctricos de segunda mano en estos momentos.

Además, también han anticipado una autonomía de 450 kilómetros bajo el ciclo de homologación WLTP, cifra que variará en función de potencia y tamaño de la batería.

Por otra parte nos encontramos con Renault, firma que lleva desde hace tiempo trabajando en los Renault 4 y 5 eléctricos. El primero de ellos será un SUV eléctrico y compacto que también costará en el entorno de los 25.000 euros, dejando que su hermano pequeño, el Renault 5, sea algo más barato debido a su condición de compacto.

Sea como fuere, ambos modelos buscarán romper con la situación actual en la que encontramos un coche eléctrico caro, situación que impide que considerar su compra sea algo sencillo. Y además este cambio lo veremos mucho antes de lo que creemos, ya que Renault tiene todo listo para que la presentación del nuevo Renault 5 se produzca este mismo verano.

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