La falta de perspectivas laborales ha disparado la matriculación en la Formación Profesional durante los últimos años, impulsada en buena parte por jóvenes de 20 años o más, que son ya el 43,9 % de todos los alumnos de los ciclos formativos de grado medio, cuando eran el 31 % al inicio de la crisis. Algo similar ha ocurrido con los estudiantes de más edad de la FP de grado superior.
Los de 23 años o más eran el 32,3 % en el curso 2007-08, para subir hasta el 39,3 % en el 2011-12, según el últimoanuario oficial 'Las cifras de la educación en España'. En este caso, no siempre son parados, sino también universitariosque no pueden seguir pagando la matrícula de la carrera o han fracasado académicamente.
En general, la FP media es una etapa que comienza a cursarse ordinariamente a la edad teórica de 16 años, cuando se ha terminado la Secundaria Obligatoria; en la de grado superior se entra con el título de Bachillerato. También se puede acceder a la FP media y superior con pruebas reguladas por las administraciones a partir de los 17 y 18 años, respectivamente, según los casos.
El alumnado presencial de la FP media en régimen ordinario y de adultos ha pasado de 236.489 matriculados en el curso 2007-08 a 302.445 en el 2011-12, lo que supone un aumento de 65.956 (27,9 %).
El grueso de la subida corresponde a los estudiantes de 20 años o más -de 73.312 a 132.773- con un crecimiento de 59.461 (81,1 %), hasta convertirse en más de dos quintas partes de todos los matriculados de la FP de grado medio. El conjunto de edades inferiores (de 16 a 19 años) ha aumentado de 163.177 a 169.672, con una subida de 6.495 alumnos (4 %).
Sin embargo, el peso relativo de los estudiantes de estas edades en el total de matriculados de FP media ha caído del 69 al 56,1 % entre ambos cursos. En el mismo período, los matriculados de FP superior presencial en régimen ordinario y de adultos han pasado de 215.052 a 280.495, con un aumento de 65.443 (30,4 %).