Alquiler para universitarios

Pisos en alquiler para estudiantes: pocos y cada vez más caros

La vuelta al curso escolar es cada vez más costosa, sea cual sea la edad que tengan los estudiantes. Pero en el caso de los universitarios, la subida de precios de los alquileres supone una de las mayores preocupaciones que puedan tener a lo largo de toda su carrera. Y el problema cada año va a más. Al inicio de este nuevo curso resulta ya muy difícil encontrar un piso decente y, mucho menos, a un precio asequible.

Jóvenes universitarios buscan piso

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Para los universitarios que estudian en una ciudad distinta de la suya, la experiencia suele ser toda una aventura. Pero cuando llega el momento de buscar un lugar donde residir durante los años que dura la carrera, entonces la aventura se convierte en toda una odisea.

Con el curso a punto de comenzar ya es casi imposible que un universitario encuentre un lugar donde vivir este año. Gabriela, una joven que este año estudiará en Málaga, se queja de que "cuando vas a verlo, la persona que ha llegado antes que tú ya se lo ha quedado".

Aún en el caso de tener mucha suerte y encontrar una vivienda que alquilar, la segunda bofetada es saber elprecio que les pedirá el casero. Lucía, estudiante de Educación Física en Valencia, es una "afortunada" porque no paga mucho en comparación con lo que se suele pedir: 300 euros por una habitación en un piso compartido con otras dos compañeras.

A algún estudiante se le puede ocurrir que tal vez sea una buena idea vivir de alquiler solo. Mireia, estudiante en Barcelona, lo tiene claro: "Si eres estudiante y quieres vivir solo, te tiene que tocar la lotería".

Lotería es llevarse bien con todos los compañeros de piso cuando la opción es compartirlo con muchas personas. Sara, que es de Murcia pero está estudiando en Madrid, dice que no es raro encontrarse con pisos para 5 ó 6 personas, pero que conoce casos de viviendas que se llegaban a compartir entre 11 estudiantes.

Cinco son los que viven en el piso compartido de Valencia donde está Dimitri. Él vino de Albacete para estudiar Biología. Ante las dificultades para encontrar un lugar donde residir acudió a una inmobiliaria. Y así lo consiguió pero a un precio que no puede considerarse realmente barato. Primero tuvo que pagar el servicio de búsqueda de alquiler a la inmobiliaria, y luego todos los meses 345 euros (285 euros por la habitación más 60 por servicios y limpieza). Si eso lo multiplicamos por los cinco estudiantes que residen en el piso, la factura mensual se eleva a 1.725 euros. Y no estamos hablando de un palacete, Dimitri nos enseña algunas fotos de la vivienda y, en el mejor de los casos, se puede decir simplemente que "no está mal".

Ante esta situación que se repite por toda España hay estudiantes que echan cuentas y ven si les merece la pena pagar estas cifras. Ana ya lo ha decidido. Es de un pueblo que está a 50 kilómetros de Málaga, donde estudia. Ida y vuelta todos los días son 100 kilómetros de coche, y si no suben mucho más los carburantes la factura mensual en gasolina asciende a unos 250 euros. Eso es bastante menos de lo que pagaría si tuviera que alquilar una habitación en la ciudad, pagarse el wifi, la comida, el autobús para ir a la universidad... Así que este año seguirá viviendo en su casa aunque sea a costa de perder tiempo en la carretera.

Por último queda la alternativa de buscar una residencia de estudiantes. Lo bueno es que suelen estar cerca de los centros universitarios donde estudian. Lo malo son otra vez los precios. Marina, barcelonesa que ha venido este año a Madrid a estudiar un Máster en Ingeniería Aeronáutica, ha optado por esta vía. Cada mes tendrá que pagar 1.600 euros. El precio incluye pensión completa pero no deja de ser tan solo una habitación por el mismo precio que en muchos sitios se está pidiendo por el piso completo.

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