Después de pasar la mayor parte de esta jornada festiva para otras actividades con pérdidas, la bolsa española ha conseguido subir el 0,06 por ciento con la colaboración del mercado de deuda, donde la prima de riesgo se ha aproximado a 500 puntos básicos.
Con la prima de riesgo en 508 puntos básicos, el índice de referencia de la bolsa española, el IBEX 35, ganó 4 puntos, el 0,06 por ciento, hasta 7.128,80 puntos. Las pérdidas anuales caen al 16,78 por ciento. De los grandes valores bajaron Iberdrola, el 0,42 por ciento, e Inditex, 0,4 por ciento, en tanto que Repsol subió el 0,52 por ciento; BBVA y Telefónica, el 0,35 por ciento cada uno, y Banco Santander, el 0,13 por ciento.
Bankia ha vuelto a liderar una jornada más los ascensos, con una subida del 6,37%. Muy cerca de la entidad se volvió a situar Abengoa, que se revalorizó un 5,7%, a quien siguió Sacyr-Vallehermoso (2,32%) y Amadeus y Red Eléctrica (ambos con una subida del 1,29%). Entre los principales valores del selectivo madrileño, Santander (+0,13%) y BBVA (+0,35%) contribuyeron al impulso del Ibex 35, junto a Telefónica, que también aumentó un 0,35%, y Repsol, que subió un 0,52%.
Por el contrario, los principales descensos de la jornada los registraron los títulos de ArcelorMittal (-2,66%), Acerinox (-2,09%), Acciona (-1,65%) e IAG (-1,47%).
Con esta leve subida, el selectivo madrileño pudo cerrar en positivo en una jornada en la que las principales plazas del Viejo Continente acabaron la sesión con descensos a excepción de la española y la italiana (+0,85%).
Cae la prima de riesgo
En el mercado de deuda, la presión de los inversores sobre la deuda española se relabaja considerablemente, ya que al cierre de los mercados bursátiles europeos la prima de riesgo del bono español a diez años se reducía hasta los 508 puntos básicos y la rentabilidad se situaba en el 6,693%.
De esta manera, el diferencial del bono respecto a su homólogo alemán descendía alrededor de 17 puntos básicos en una jornada y registraba su nivel más bajo desde el pasado 5 julio, día en el que la prima de riesgo se disparó coincidiendo con la reunión de julio del Banco Central Europeo, en la que recortó los tipos de interés hasta un nuevo mínimo histórico del 0,75%.