La prima de riesgo española se ha relajado hasta cerrar en los 482 puntos básicos, después de alcanzar un máximo diario de 507, en medio de rumores acerca de que el Banco Central Europeo (BCE) podría volver a intervenir comprando deuda, algo que lleva nueve semanas sin hacer.
La prima de riesgo española se elevaba afectada por los rumores insistentes que apuntan a que Grecia saldrá del euro, además de por las dudas que existen sobre el sector financiero español y las comunidades autónomas.
Según los datos del mercado, al cierre, la rentabilidad del bono español a diez años se reducía hasta el 6,29 %, mientras que el de su homólogo alemán se situaba en el 1,47 %.