La prima de riesgo ofrecida a los inversores por los bonos españoles a diez años respecto a sus homólogos alemanes escalaba este viernes por encima de la cota de los 240 puntos básicos, hasta marcar su nivel más alto desde mediados del pasado mes de enero ante la incertidumbre respecto a una quita en la deuda griega y la proximidad de la publicación de los resultados de los test de estrés a la banca europea.
En concreto, la deuda española con vencimiento a diez años ofrecía una rentabilidad del 5,474%, 241 puntos básicos por encima del interés ofrecido por el 'bund', según los datos del mercado secundario recopilados por Europa Press.
Por su parte, el coste de asegurar los bonos españoles frente al riesgo de impago (CDS) experimentaba un considerable incremento y llegaba a 253 puntos, lo que implica un coste anual de 253.000 euros por la emisión de diez millones de euros en bonos a cinco años, frente a los 247,5 puntos del anterior cierre.
En este sentido, Soledad Pellón, analista de IG Markets, apunta que "no era normal que hubiera bajado tanto" y atribuye parte de la escalada del riesgo país a la incertidumbre sobre la "reestructuración suave de Grecia", así como a la situación de Strauss-Kahn, "uno de los grandes defensores de las ayudas a los países periféricos".
Asimismo, Pellón recuerda la cercanía del final del programa de alivio cuantitativo (QE2) de la Reserva Federal de EEUU, así como la publicación en junio de los resultados de la segunda edición de las pruebas de estrés de la banca europea.
Por su parte, la prima de riesgo de Portugal se situaba en 621 puntos básicos, con un interés del 9,233%, mientras el 'spread' de los bonos irlandeses llegaba a 749 puntos básicos, con un rendimiento del 10,523%, y en el caso de la deuda griega el diferencial se ampliaba a 1.379 puntos básicos, con un interés del 16,767%.