El Gobierno británico está dispuesto a participar en un eventual rescate del sector bancario irlandés, porque va "en el interés nacional de Reino Unido", según dijo en Bruselas el ministro británico de Finanzas, George Osborne.
"Irlanda es nuestro vecino más cercano y es en el interés nacional de Reino Unido que la economía irlandesa sea exitosa y tengamos un sistema bancario estable. Así que Reino Unido permanece preparado para apoyar a Irlanda en los pasos que necesite tomar para lograr esa estabilidad", dijo Osborne, antes de participar en el Consejo de ministros de Economía y Finanzas de la UE (Ecofin).
Los veintisiete ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea (UE) tratarán este miércoles el eventual rescate del sector bancario irlandés, en el que Reino Unido está llamado a jugar un papel clave por razones históricas y debido a que su sector financiero está muy implicado en Irlanda.
Reino Unido, que no es miembro del euro, no participó en la reunión de ayer del Eurogrupo en la que los dieciséis miembros de la Eurozona analizaron la situación en Irlanda y el peligro de contagio a otros países con dificultades presupuestarias como Portugal.
Durante el encuentro, Irlanda aceptó intensificar los trabajos preparatorios de un eventual rescate de su sector financiero por parte de la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI), aunque insistió en que, de momento, no necesita la ayuda de sus socios.
El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, afirmó hoy que "es esencial que la confianza en el sector bancario de Irlanda sea restablecido por el bien de la estabilidad financiera de Europa y por el bien de la restauración de la confianza en la economía real de Irlanda". "La situación es apremiante y muy seria, no tenemos tiempo que perder", enfatizó el comisario.
Preguntado por la negativa de Irlanda a solicitar de momento la ayuda de sus socios pese al riesgo de contagio a otros miembros de la zona euro, Rehn señaló que "Irlanda ha sido muy constructiva".
El ministro de Finanzas belga, Didier Reynders, explicó que es necesario "examinar la situación de Irlanda para determinar "si el estado puede sobrevivir a las necesidades de liquidez del sector bancario" y "si las medidas tomadas por Irlanda son suficientes" para estabilizar la situación de su banca. "Si no es el caso, habrá probablemente una intervención del fondo europeo", añadió Reynders.