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mercado laboral

Robots. ¿Los trabajadores del futuro?

Cada vez que los vemos, nos parecen más propios de una película de ciencia ficción. Pero los robots han venido para quedarse, y para incorporarse al mercado laboral. En Valencia está a punto de abrir el primer restaurante con dos autómatas como camareros.

En un restaurante de Valencia tienen dos nuevas empleadas robots. Su misión es" agilizar el trabajo físico de los camareros" dice el propietario.

Trabajarán los 365 del año, pero no sustituirán a sus compañeros humanos Las máquinas solo llevarán el pedido y no están capacitadas para tomar nota.

En Asturias también han creado el primer brazo robotizado que escancia sidra. Se llama Manolín y sus clientes dicen que no lo hace del todo mal

En China, ya tienen sus propios policías robots. Su objetivo: controlar el tráfico del país más poblado del mundo

Y también hay un semihumanoide llamado Pepper que es capaz de leer nuestros sentimientos. Hoy en día trabaja como recepcionista en oficinas de Reino Unido aunque también puede ser profesor e investigador

Y luego está Sophia " estuve trabajando en Galicia" le dice con voz metálica a Pablo Motos en el programa El Hormiguero. Se encarga de resolver dudas o almacenar datos a través de conversaciones con humanos, además de hacernos compañía.

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Municipio de Letur (Albacete) tras la DANA

Letur, el pueblo destrozado por la DANA, recibirá un millón de euros de la Diputación de Albacete

Más de 300 hectáreas han sufrido daños, los caminos y muros han quedado destrozados y hasta seis personas han perdido la vida tras el temporal del pasado 29 de octubre.

Gimnasio Paiporta

Reabren negocios en Paiporta a pesar de que las ayudas siguen sin llegar: "Es el negocio del que comen mis hijos y mi familia"

Los comercios fueron uno de los grandes afectados por la DANA que inundó las regiones de Comunidad Valenciana, Andalucía y Castila-La Mancha. Principalmente al situarse en los bajos. En algunas zonas el agua llegó a alcanzar los dos metros de altura, dejando los negocios totalmente destrozados y llenos de barro. Dos semanas después de duro trabajo, comienzan a abrir sus puertas