El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, coincide con el Gobierno en que hace falta una intervención del Banco Central Europeo (BCE) para hacer frente a la crisis de deuda, pero ha advertido de que esa es sólo una solución "temporal" y que la definitiva sería la emisión de eurobonos.
"La intervención del BCE baja la fiebre, es el antipirético, pero el antibiótico se llama eurobono", ha dicho en una entrevista en RNE recogida por Europa Press, reiterando el símil que utilizó el miércoles en Bruselas.
Rubalcaba ha subrayado que la deuda española está "carísima" y ha recordado que el BCE ya intervino para comprar deuda el pasado noviembre, durante unos días que ha calificado de "tremendos" y que coincidieron con la campaña electoral. Sin embargo, a juicio de Rubalcaba eso no basta, porque si el BCE compra deuda esta se abarata, pero "o lo hace siempre, para lo cual hay que cambiar los estatutos, o es una solución temporal".
El líder del PSOE espera obtener información detallada de lo que sucedió en el Consejo Europeo informal del miércoles en Bruselas cuando se reúna el viernes con Mariano Rajoy en la Moncloa pero, de entrada, considera positivo para España que el Consejo fuese una "cumbre de crecimiento" después de años de cumbres de ajustes: "Eso es un éxito para los socialistas y para España".
Rubalcaba ha confiado en que en la Cumbre oficial de junio se den pasos en esa dirección y en una política que combine ajustes con crecimiento económico y, además, que permita "atemperar el ritmo de ajustes": "No hay país que pueda reducir cinco puntos de déficit en dos años sin destrozar el país". Según Rubalcaba, los socialdemócratas holandeses también están en esa clave.
Esto es lo que Rubalcaba transmitirá el viernes a Rajoy en su reunión en Moncloa. Además, ha defendido que su conversación del martes, previa a la Cumbre de Bruselas sirvió para coordinar mensajes y se ha mostrado convencido de que sobre algunos asuntos dijeron lo mismo, uno ante los socialistas europeos y otro en el Consejo.
El líder del PSOE ha subrayado que él se reunió con primeros ministros socialdemócratas que luego fueron a la cumbre y, por eso, es "razonable" que tuviera información del presidente. "Que el primer ministro belga me escuche a mi hablar de España lo mismo que luego dice él fortalece al país, y en esta situación muy difícil eso es bueno", ha argumentado.
En esa línea, ha apuntado que de cara a la cumbre formal de junio el PSOE intentará que Gobierno y oposición puedan presentar propuestas comunes. "Siempre lo hemos hecho así, se había cortado esa costumbre y yo quiero reanudarla", ha afirmado.
