Salgado ha explicado que la prima de riesgo de la deuda española está por encima de lo que justifican los fundamentos de la economía y no debería superar los 150 puntos básicos, pero ha negado la necesidad de una ayuda financiera.
La vicepresidenta ha indicado que con las reformas que se están llevando a cabo y con más unidad europea la inestabilidad en los mercados financieros debería desaparecer.
En este sentido, ha pedido a Grecia que cumpla con los compromisos adquiridos y a todos los países de la zona euro que aprueben el acuerdo suscrito en julio para flexibilizar el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera.
Además, ha vuelto a descartar la posibilidad de una segunda recesión económica en la UE y, aunque ha reconocido que la economía atraviesa un "momento complicado", ha asegurado que la recuperación está en marcha y "habrá crecimiento".
"Hay que quedarse con los datos y no generar desconfianza", ha subrayado tras aseverar que "sin ninguna duda, Europa no va a caer en ninguna recesión".
Salgado también ha descartado nuevos recortes en la Administración General del Estado para cumplir con el objetivo del déficit del 6 % del PIB marcado para este año y ha recalcado que el Ejecutivo sigue la senda de consolidación fiscal marcada.
Ha añadido que "en absoluto" habrá ajustes en la administración central y ha recordado que son las comunidades autónomas las que "deben hacer más esfuerzos".