Una multitudinaria manifestación convocada por las cuatro asociaciones del sector del Taxi de Madrid ha tomado este jueves el centro de la capital para criticar la "falta de compromiso" por parte de las administraciones para garantizar el servicio que presta el sector ante la irrupción de nuevas plataformas de arrendamiento de Vehículos con Conductor (VTC) como Uber y Cabify.
A esta manifestación se ha sumado de forma simultánea un paro de dos horas entre las 11 y las 13 horas para todo el sector del taxi que, según los organizadores ha sido secundado por el cien por cien de los profesionales. En las principales paradas de la capital como Atocha o el Aeropuerto de Barajas no habido durante este tiempo vehículos disponibles.
De hecho, las calles de Madrid han estado al mediodía sin taxis, ya que los pocos que estaban circulando, no recogían viajeros. Por su parte, los que llegaban a Barajas, han estado dejando a los pasajeros en las inmediaciones de las terminales para evitar ser increpados por los compañeros, han asegurado fuentes presenciales en la zona.
Por otro lado, la huelga de taxistas convocada en todo el área metropolitana de Barcelona por los sindicatos del sector está teniendo un seguimiento mayoritario y ha vaciado prácticamente de vehículos las paradas de taxis de puntos como la estación de Sants o la Terminal 1 del Aeropuerto. Los sindicatos protestan por la progresiva liberalización del sector, que emplea en el área metropolitana a 10.500 taxistas, con el incremento de las licencias para los vehículos de alquiler con conductor y reclaman a las administraciones públicas que frenen estas autorizaciones.
El secretario intercomarcal de Barcelona del Sindicato del Taxi de Catalunya (STAC), Carlos Fernández, ha asegurado a Efe que el seguimiento del paro, que se desarrolla entre las 08.00 y las 20.00 de hoy, es "prácticamente total" y que se ha dejado notar en especial en el aeropuerto de El Prat, en la estación de Sants y en plaza Cataluña. De hecho, las paradas del Aerobús, el servicio de lanzadera que une Barcelona con el aeropuerto, en plaza Cataluña, registraban a primera hora de la mañana colas importantes, más propias de la temporada alta de verano.
