La Estación de Atocha o la Embajada de Italia. Son dos ejemplos de dos edificios exentos del pago del IBI. Uno por ser del Estado y otro por un acuerdo, en este caso, con el país italiano. La ley así lo establece.
Concretamente, no pagan el Impuesto de Bienes Inmuebles aquellos edificios que sean del Estado o de las administraciones, la Cruz Roja, por ser un organismo benéfico, las embajadas y consulados y las estaciones de ferrocarilles. Tampoco las entidades religiosas, sean musulmanas, judías y por supuesto la católica.
Además los Ayuntamientos no cobran a aquellos centros destinados a la educación, entidades sin ánimo de lucro -aquí pueden entrar partidos políticos- y repoblaciones forestales . También están exentos los monumentos históricos.
Por ejemplo, la duquesa de Alba no paga el IBI del Palacio de Liria de Madrid. Tampoco lo hacen el Hotel Palace, la SGAE o las plazas de toros. Con todo, este impuesto tiene mucho peso recaudatorio para los ayuntamientos que ingresan, anualmente, en total cerca de 10 mil millones de euros por este impuesto.