Con la polémica de los taxis, la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid han acordado un borrador para regular las VTC en el que se sustituye la precontratación temporal, es decir, solicitar el servicio con un tiempo de antelación, por la espacial, en la que se establece una distancia entre el vehículo que se solicita y el cliente.
Por su parte, José Miguel Fúnez, el responsable de comunicación de la Federación Profesional de Taxis de Madrid, ha calificado de "tomadura de pelo" el acuerdo al que llegaron la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento y ha explicado que su objetivo es que se "marque una regulación" a las VTC que le "diferencie del sector del taxi".
A la huelga de hambre que comenzaron haciendo las ocho taxistas se ha añadido otra compañera más esta sexta jornada. Concha Guardado, taxista en huelga de hambre, ha admitido que este segundo día es "mucho más duro que el primero", porque solo beben agua y bebidas isotónicas. Guardado ha advertido de que seguirán en huelga de hambre hasta que el Gobierno regional "regule el servicio de las VTC".
De esta manera, la taxista ha pedido a la Comunidad de Madrid que deje de "insultarlos con propuestas que no sirven para nada" y afirmado que llevan años exigiendo que se regule esta situación porque ellos trabajan más de catorce horas, incluidos los fines de semana, por lo que no tienen tiempo para ver a sus familiares y ha añadido que las propuestas del Gobierno regional "solo sirven para perder el tiempo".
Desde el sector del taxi advierten de que no van a permitir que en Madrid se acabe con el trabajo que realizan más de 25.000 personas, que según Fúnez, es obligación de las administraciones públicas proteger. "Queremos que la Comunidad realice el mandato que le hizo el Tribunal Constitucional en el año 1996, cuando dijo que las competencias de transportes las tienen las comunidades autónomas y los ayuntamientos", ha indicado el responsable de comunicación de los taxistas, José Miguel Fúnez.
