En concreto, el Tesoro ha colocado 681 millones de euros en bonos a tres años con cupón 3,75%. En este caso, la demanda ha superado en 4,8 veces lo emitido (2 veces en la anterior ocasión) y el tipo medio ha bajado del 3,390% al 3,358%.
Por otro lado, ha emitido 803 millones en obligaciones con cupón del 5,50% y vida hasta el 30 de julio de 2017. La demanda de los inversores de este tipo de papel ha superado en 3,1 veces lo colocado (2,6 veces en la anterior ocasión) y el tipo medio ha bajado del 4,477% al 4,200%.
Finalmente, el organismo ha emitido 540 millones en obligaciones con cupón del 4,90% y vencimiento a 30 de julio de 2040, un papel que no emite habitualmente. Las peticiones de estas obligaciones han superado en 2,1 veces lo colocado y el interés medio se ha situado en el 5,893%, más alto que el registrado la última vez que se subastaron estas obligaciones (4,782%).
En cualquier caso, el Tesoro ha superado la última subasta de bonos y la penúltima prueba de 2012 en los mercados, y sigue adelantando financiación del año que viene en un entorno en el que la prima de riesgo ronda los 400 puntos.
La prima había dejado atrás los 400 tras el acuerdo de los veintisiete para convertir al Banco Central Europeo (BCE) en supervisor de los bancos de la eurozona después de 14 horas de negociación, aunque ha vuelto a subir levemente, al entorno de los 404 puntos básicos.